Hace 3 años | Por pinaveta a msn.com
Publicado hace 3 años por pinaveta a msn.com

Las cicatrices de los bombardeos en la fachada de la iglesia de Sant Felip Neri todavía estremecen 83 años después. Un 30 de enero de 1938, uno de los proyectiles más crueles lanzados por la aviación fascista italiana acabó con la vida de 42 personas, la mayoría niños y niñas, que buscaban refugio en la iglesia. Una placa recuerda a las víctimas. Hay otros escenarios no tan conocidos en la ciudad que conservan las huellas de los ataques durante la Guerra Civil. Por ejemplo, en la plaza Garriga i Bachs, en el edificio que da con la calle...