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Hola. Soy una persona con discapacidad.
No, no soy un discapacitado, igual que quienes leéis esto no sois "un moreno", "un gordo" o "un blanco". Soy una persona que, por otra parte, tiene una discapacidad, en el estricto sentido de que no tengo la misma capacidad -en este caso visual- que vosotros, los "normales".
Y digo esto porque me siento realmente ofendido con alguno de los comentarios que leo por aquí. Al parecer no se debe comparar la discriminación positiva en el caso de las personas con discapacidad con el de las mujeres. Al parecer si hacemos eso estamos menospreciando a las mujeres, porque ellas no tienen ninguna limitación, y hacer esa comparación es sexista y ofensiva.
Pero decirme a mí que mi discapacidad me limita y que es por eso por lo que necesito ayuda, al parecer, no supone menosprecio alguno. Al fin y al cabo yo soy un pobrecito discapacitado que no puede hacer las cosas como los "normales", y en mi caso la discriminación positiva es para ayudarme a encontrar un trabajo que pueda hacer a pesar de mis limitaciones. No como en el caso de las mujeres, que ellas lo pueden todo y lo que pasa es que los hombres las marginan porque son (somos) unos machistas de mierda.
LOS COJONES.
Pido perdón por la brusquedad, pero es que a veces hay que ser brusco para que la gente reaccione. Sí, me toca bastante los ovoides esa visión de "pobrecitos" que tenéis algunos -y algunas- "normales" sobre la discapacidad, como si aquí el hecho de tener un problema visual ya me convirtiera en un improductivo de mierda o se me estuviera haciendo un favor porque de otra manera no conseguiría un curro. Lo que está claro es que, con semejante mentalidad, es difícil encontrar un curro, porque primero hay que romperle los esquemas al entrevistador de turno.
Y sí, eso es lo que denuncia este vídeo, que los "normales" os pensáis que una persona con discapacidad lo único que tiene son limitaciones y que no va a ser productivo en su trabajo. Pensáis en esa subvención en términos de "compensación" ante la posible pérdida económica que supone el contratar a un semiinútil improductivo. A quienes pensáis en las limitaciones antes que en las capacidades, me gustaría deciros que la mayor limitación está en vuestra cabeza y en vuestra poca visión de conjunto. Esa falta de capacidad para ir más allá sí que es una discapacidad limitante de cojones.
Quizá no os habéis dado cuenta de que, precisamente por tener una discapacidad, muchos nos hemos tenido que romper los cuernos y esforzarnos el triple para demostraros a los "normales" que no somos inútiles; os olvidáis de que mi formación y mi preparación pueden ser muchísimo mayores; de que la calidad de mis informes es de hecho mayor, porque también tienen que ser accesibles para mí; y de que toda mi vida me la he pasado buscando maneras de desenvolverme que compensen mis limitaciones, y eso me ha permitido encontrar formas de hacer las cosas que, en muchos casos, son más eficientes que las de los "normales".
NO. La subvención no es una compensación por una menor productividad, sino un incentivo necesario por culpa de esa percepción errónea, que pretende romper las barreras mentales que tienen las empresas a la hora de contratar a una persona con discapacidad. Porque, lo queráis o no, la situación de desventaja de la que parto es esa percepción distorsionada que tiene la sociedad de lo que puedo o no puedo hacer. El hecho triste es que, sin subvención, el miedo prevalece.
Porque, para ir a una entrevista, he de superar primero el miedo irracional del empresario que se plantea contratarme, y que apenas es capaz de pensar en otra cosa que no sea mi hipotética improductividad; un empresario que siente auténtico pavor a que mis futuros compañeros pierdan más productividad aún por tener que ayudar al tullido, y más miedo aún a tener que modificar en lo más mínimo su forma de trabajo para adaptarse al pobrecito cegato. Me imagino lo que se le pasara por la cabeza si la persona tiene además necesidades especiales como instalaciones accesibles o un ordenador adaptado... No me extrañaría nada que hasta imagine criaturas infernales quemando sus beneficios en enormes calderas de lava.
Esas barreras, y no otras, son las que hacen que me sea más difícil encontrar un trabajo, o moverme con la misma facilidad en el mercado laboral para mejorar profesionalmente. Tengo tanto derecho como vosotros los "normales" a que esa movilidad sea acorde a mis capacidades reales, y no a mis circunstancias personales.
Y si hacer efectivo ese derecho supone tener que subvencionar a las empresas para destruir sus temores irracionales, los que "pagáis como putos cabrones sin tener ninguna culpa por algo que no habéis hecho" pues os jodéis, que yo tampoco tengo la culpa de vuestra estrechez de miras, y de momento me tengo que joder todos los días porque pensáis que me hacéis un favor al darme un curro, cuando la realidad es que a lo mejor os doy mil vueltas y sois vosotros quienes deberíais dar gracias por haber llegado siquiera a caminar sobre dos patas.
Porque la realidad es que mi discapacidad afecta más bien poco o nada a mi productividad. De hecho, diría que es más bien al contrario, porque mi condición me ha impulsado a buscar métodos alternativos de hacer las cosas, lo que muchas veces me permite hacerlas más rápido que un "normal". Puedo decir sin rubor que soy un puto crack en lo que hago. Mis informes y presentaciones tienen una calidad excelente, participo como experto en muchas reuniones con clientes, mi alto nivel de inglés me permite incluso impartir formación especializada a nivel internacional, doy ponencias, creo que soy buen comunicador, se me consulta al diseñar proyectos novedosos, difundo información valiosa al resto de los departamentos... ¿De verdad creéis que tengo limitaciones? Más bien diría que mis límites están donde yo me los quiera poner, y no donde vosotros pensáis que están.
Pero, pese a todo, no soy "normal". Y eso es lo único que las empresas ven. Son las empresas las que tienen un problema de visión, no yo. Es su problema de visión el que me limita, no el mío.
Y sí, lo mismo pasa con las mujeres. Exactamente lo mismo.
Sí, también se rumorea que en las noches de luna llena, a JRMora le salen cuernos, patas de cabra y una enorme cola que utiliza para capturar niños pequeños, y luego utiliza su sangre para dibujar sus viñetas... Vamos, que lo de Batasuna es una tontería comparado con su verdadero Poder.
Lo que hay que leer, oiga
Lo mejor es que también está copiado donde dice... "¿Existen derechos de reproducción de los artículos?" jajajaja, me parto
#85 ¿Qué quieres decir exactamente con "discriminación a gente inocente"? ¿Quieres decir acaso que, como tú no tienes la culpa de mi discapacidad, te jode que se incentive a las empresas para que se olviden de ella por un minuto y piensen en contratarme? ¿Es eso? Porque si es eso, déjame que te hable un poquito de discriminación...
Discriminación es ir al supermercado y encontrarme con que todos los productos están etiquetados única y exclusivamente para gente que ve perfectamente; es ir a una estación de tren o de metro y que el pavimento no esté marcado de forma adecuada para guiar a una persona ciega sin que tenga que pedir ayuda; discriminación es que en esa misma estación sólo se pueda acceder a las vías a través de escaleras, porque los ascensores no funcionan y a nadie parece importarle, o directamente que no haya ascensores; es ir al cine -o comprarte la película- y comprobar que casi todas las películas, y también las españolas subvencionadas con dinero público -sí, también con mi dinero- no tienen audiodescripción ni subtitulado; discriminación es que, para poder usar un ordenador o un teléfono móvil, hasta hace nada una persona ciega tuviera que gastarse cientos de euros más que un "normal"; y también es dicriminación que me envíen las facturas en formatos que no son accesibles, y que la página de mi banco sea imposible de usar con un lector de pantalla, o que el cajero automático tenga una interfaz táctil inaccesible, o que los semáforos no tengan un sistema adecuado para que una persona ciega sepa cuándo cruzar, o que las plataformas de e-Learning y la TDT sigan siendo inaccesibles...
Podría seguir con muchos más ejemplos, pero sólo voy a comentar uno más: Discriminación es que tú, y la sociedad en general, seáis tan arrogantes de creer que las personas con discapacidad pueden hacer menos cosas que vosotros, o que van a ser improductivos o hacerlas con peor calidad. Y discriminación es que esa idea irracional signifique, en la práctica, que el empleo entre las personas con discapacidad apenas llegue a un 30%. Porque los empresarios sólo ven la discapacidad, y no el resto de la persona.
No, claro que tú no tienes la culpa. Y yo tampoco, no te jode, a ver si te crees que yo elegí mi discapacidad. Pero tú, como yo, como toda la sociedad, tenemos la responsabilidad de cambiar esa situación. Pero no, claro, eso no va contigo, tú eres una víctima inocente de las personas con discapacidad, que seguramente son las que te quitan el trabajo, ¿verdad? Sí, sí, como las mujeres o los inmigrantes. ¡Qué morro tienen!
Pobre, qué injusticia más grande. Deberían sacar alguna subvención para favorecer la contratación de personas hipócritas. Así seguro que estábamos en igualdad de condiciones.
Hola. Soy una persona con discapacidad.
No, no soy un discapacitado, igual que quienes leéis esto no sois "un moreno", "un gordo" o "un blanco". Soy una persona que, por otra parte, tiene una discapacidad, en el estricto sentido de que no tengo la misma capacidad -en este caso visual- que vosotros, los "normales".
Y digo esto porque me siento realmente ofendido con alguno de los comentarios que leo por aquí. Al parecer no se debe comparar la discriminación positiva en el caso de las personas con discapacidad con el de las mujeres. Al parecer si hacemos eso estamos menospreciando a las mujeres, porque ellas no tienen ninguna limitación, y hacer esa comparación es sexista y ofensiva.
Pero decirme a mí que mi discapacidad me limita y que es por eso por lo que necesito ayuda, al parecer, no supone menosprecio alguno. Al fin y al cabo yo soy un pobrecito discapacitado que no puede hacer las cosas como los "normales", y en mi caso la discriminación positiva es para ayudarme a encontrar un trabajo que pueda hacer a pesar de mis limitaciones. No como en el caso de las mujeres, que ellas lo pueden todo y lo que pasa es que los hombres las marginan porque son (somos) unos machistas de mierda.
LOS COJONES.
Pido perdón por la brusquedad, pero es que a veces hay que ser brusco para que la gente reaccione. Sí, me toca bastante los ovoides esa visión de "pobrecitos" que tenéis algunos -y algunas- "normales" sobre la discapacidad, como si aquí el hecho de tener un problema visual ya me convirtiera en un improductivo de mierda o se me estuviera haciendo un favor porque de otra manera no conseguiría un curro. Lo que está claro es que, con semejante mentalidad, es difícil encontrar un curro, porque primero hay que romperle los esquemas al entrevistador de turno.
Y sí, eso es lo que denuncia este vídeo, que los "normales" os pensáis que una persona con discapacidad lo único que tiene son limitaciones y que no va a ser productivo en su trabajo. Pensáis en esa subvención en términos de "compensación" ante la posible pérdida económica que supone el contratar a un semiinútil improductivo. A quienes pensáis en las limitaciones antes que en las capacidades, me gustaría deciros que la mayor limitación está en vuestra cabeza y en vuestra poca visión de conjunto. Esa falta de capacidad para ir más allá sí que es una discapacidad limitante de cojones.
Quizá no os habéis dado cuenta de que, precisamente por tener una discapacidad, muchos nos hemos tenido que romper los cuernos y esforzarnos el triple para demostraros a los "normales" que no somos inútiles; os olvidáis de que mi formación y mi preparación pueden ser muchísimo mayores; de que la calidad de mis informes es de hecho mayor, porque también tienen que ser accesibles para mí; y de que toda mi vida me la he pasado buscando maneras de desenvolverme que compensen mis limitaciones, y eso me ha permitido encontrar formas de hacer las cosas que, en muchos casos, son más eficientes que las de los "normales".
NO. La subvención no es una compensación por una menor productividad, sino un incentivo necesario por culpa de esa percepción errónea, que pretende romper las barreras mentales que tienen las empresas a la hora de contratar a una persona con discapacidad. Porque, lo queráis o no, la situación de desventaja de la que parto es esa percepción distorsionada que tiene la sociedad de lo que puedo o no puedo hacer. El hecho triste es que, sin subvención, el miedo prevalece.
Porque, para ir a una entrevista, he de superar primero el miedo irracional del empresario que se plantea contratarme, y que apenas es capaz de pensar en otra cosa que no sea mi hipotética improductividad; un empresario que siente auténtico pavor a que mis futuros compañeros pierdan más productividad aún por tener que ayudar al tullido, y más miedo aún a tener que modificar en lo más mínimo su forma de trabajo para adaptarse al pobrecito cegato. Me imagino lo que se le pasara por la cabeza si la persona tiene además necesidades especiales como instalaciones accesibles o un ordenador adaptado... No me extrañaría nada que hasta imagine criaturas infernales quemando sus beneficios en enormes calderas de lava.
Esas barreras, y no otras, son las que hacen que me sea más difícil encontrar un trabajo, o moverme con la misma facilidad en el mercado laboral para mejorar profesionalmente. Tengo tanto derecho como vosotros los "normales" a que esa movilidad sea acorde a mis capacidades reales, y no a mis circunstancias personales.
Y si hacer efectivo ese derecho supone tener que subvencionar a las empresas para destruir sus temores irracionales, los que "pagáis como putos cabrones sin tener ninguna culpa por algo que no habéis hecho" pues os jodéis, que yo tampoco tengo la culpa de vuestra estrechez de miras, y de momento me tengo que joder todos los días porque pensáis que me hacéis un favor al darme un curro, cuando la realidad es que a lo mejor os doy mil vueltas y sois vosotros quienes deberíais dar gracias por haber llegado siquiera a caminar sobre dos patas.
Porque la realidad es que mi discapacidad afecta más bien poco o nada a mi productividad. De hecho, diría que es más bien al contrario, porque mi condición me ha impulsado a buscar métodos alternativos de hacer las cosas, lo que muchas veces me permite hacerlas más rápido que un "normal". Puedo decir sin rubor que soy un puto crack en lo que hago. Mis informes y presentaciones tienen una calidad excelente, participo como experto en muchas reuniones con clientes, mi alto nivel de inglés me permite incluso impartir formación especializada a nivel internacional, doy ponencias, creo que soy buen comunicador, se me consulta al diseñar proyectos novedosos, difundo información valiosa al resto de los departamentos... ¿De verdad creéis que tengo limitaciones? Más bien diría que mis límites están donde yo me los quiera poner, y no donde vosotros pensáis que están.
Pero, pese a todo, no soy "normal". Y eso es lo único que las empresas ven. Son las empresas las que tienen un problema de visión, no yo. Es su problema de visión el que me limita, no el mío.
Y sí, lo mismo pasa con las mujeres. Exactamente lo mismo.
Sí, también se rumorea que en las noches de luna llena, a JRMora le salen cuernos, patas de cabra y una enorme cola que utiliza para capturar niños pequeños, y luego utiliza su sangre para dibujar sus viñetas... Vamos, que lo de Batasuna es una tontería comparado con su verdadero Poder.
Lo que hay que leer, oiga
Lo mejor es que también está copiado donde dice... "¿Existen derechos de reproducción de los artículos?" jajajaja, me parto
#85 ¿Qué quieres decir exactamente con "discriminación a gente inocente"? ¿Quieres decir acaso que, como tú no tienes la culpa de mi discapacidad, te jode que se incentive a las empresas para que se olviden de ella por un minuto y piensen en contratarme? ¿Es eso? Porque si es eso, déjame que te hable un poquito de discriminación...
Discriminación es ir al supermercado y encontrarme con que todos los productos están etiquetados única y exclusivamente para gente que ve perfectamente; es ir a una estación de tren o de metro y que el pavimento no esté marcado de forma adecuada para guiar a una persona ciega sin que tenga que pedir ayuda; discriminación es que en esa misma estación sólo se pueda acceder a las vías a través de escaleras, porque los ascensores no funcionan y a nadie parece importarle, o directamente que no haya ascensores; es ir al cine -o comprarte la película- y comprobar que casi todas las películas, y también las españolas subvencionadas con dinero público -sí, también con mi dinero- no tienen audiodescripción ni subtitulado; discriminación es que, para poder usar un ordenador o un teléfono móvil, hasta hace nada una persona ciega tuviera que gastarse cientos de euros más que un "normal"; y también es dicriminación que me envíen las facturas en formatos que no son accesibles, y que la página de mi banco sea imposible de usar con un lector de pantalla, o que el cajero automático tenga una interfaz táctil inaccesible, o que los semáforos no tengan un sistema adecuado para que una persona ciega sepa cuándo cruzar, o que las plataformas de e-Learning y la TDT sigan siendo inaccesibles...
Podría seguir con muchos más ejemplos, pero sólo voy a comentar uno más: Discriminación es que tú, y la sociedad en general, seáis tan arrogantes de creer que las personas con discapacidad pueden hacer menos cosas que vosotros, o que van a ser improductivos o hacerlas con peor calidad. Y discriminación es que esa idea irracional signifique, en la práctica, que el empleo entre las personas con discapacidad apenas llegue a un 30%. Porque los empresarios sólo ven la discapacidad, y no el resto de la persona.
No, claro que tú no tienes la culpa. Y yo tampoco, no te jode, a ver si te crees que yo elegí mi discapacidad. Pero tú, como yo, como toda la sociedad, tenemos la responsabilidad de cambiar esa situación. Pero no, claro, eso no va contigo, tú eres una víctima inocente de las personas con discapacidad, que seguramente son las que te quitan el trabajo, ¿verdad? Sí, sí, como las mujeres o los inmigrantes. ¡Qué morro tienen!
Pobre, qué injusticia más grande. Deberían sacar alguna subvención para favorecer la contratación de personas hipócritas. Así seguro que estábamos en igualdad de condiciones.