#9 Tan ridículo como que en 2015, la copa española de fútbol tenga el nombre de un jefe de Estado impuesto por un dictador. La gente que paga esa entrada va a ver fútbol, no generalices diciendo que esas personas pagan para pitar porque es poco más que absurdo. Y si quieren pitar, que piten, que para algo tenemos libertad de expresión. ¿O es que esa libertad se puede ejercer dependiendo de quién la ejerza?
Portada
mis comunidades
otras secciones
Se acabaron las corridas.