#68 Hace unos cuantos años en cierto país habían carteles en las puertas de los establecimientos que prohibían la entrada a los negros, a la mayoría de la gente le parecía normal, a muchos hasta estupendo, si a algún negro se le ocurría entrar lo mataban sin miramientos si les venía en gana.
En otro lugar, hace siglos, si alguien decía que la tierra daba vueltas al rededor del sol, atentando así contra los cimientos de las creencias reinantes, lo mataban. A mucha gente le parecía estupendo, incluso era un espectáculo si los ejecutaban en público. Tú serías de los que iría a verlo casi con total seguridad.
Hace no tanto, en este país, quizá cuando pidieron la mano de tu madre o de tu abuela, alguien se las pasó primero por la piedra, porque así se hacía, y porque, como ahora, a unos pocos les gustaban esas cosas de tan elevada clase.
Tú eres claramente de esas gentes, de esas que frenan la historia, que en parte han hecho que las muertes se multipliquen por miríadas al frenar el avance de los derechos, y sin inmutarse. Da igual que la leyes y el poder estén podridos, tú no los defenderás realmente, simplemente te limitarás a restregarles por la cara a los que luchan porque todo sea algo más justo que no tienen razón, porque la ley no se la da. Espero que algún día se prohíba ser tan rancio y tan tosco como tú, pero no por la ley, sino por las propias convicciones y verdaderos principios. Te han contado que el mundo es derecha e izquierda, pero también hay arriba, y abajo, y detrás... y sobretodo, delante.
PD: Aseate un poco, que hueles a rancio desde aquí!
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#86 Jejeje, me gustan esos argumentos que propones en contra de mis palabras, a ellos te respondo con la condescendencia... creo que adecuada... en mi culo rebota, y en tu cara explota!
Sí, Robert, si ahora estuviéramos en la Alemania nazi tú serías de los muy nazi, el cerebro bien comido.
PD: Revisa tus escritos que también hay faltas. Sólo te lo comento porque sé que es vital para tu amor propio.