Estoy en contra de lo que predican estos tiparracos, pero decía uno de los últimos twitteros condenados a prisión que la libertad de expresión es lo que tiene, que a veces tenemos que escuchar o leer cosas que no nos gustan. Este autobús le escuece a mucha gente, me incluyo, pero también me escuce el día del orgullo Gay y no pongo el grito en el cielo cada año u ofende de ningún modo. El caso es que parece que cada vez es más común ofender a alguien por discrepar en una opinión o forma de entender la vida.
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#66 Tu padre es muy cabezón y le gusta la fricción.