Hace 10 años | Por --167347-- a diariocordoba.com
Publicado hace 10 años por --167347-- a diariocordoba.com

Hoy, sin el respaldo del partido, ni incluso las personalidades realmente relevantes tienen, salvo escasas excepciones, posibilidad de éxito. Eso traducido al castellano se llama partitocracia, y se traduce en que en el Parlamento la libertad de expresión ha sido sustituida por la disciplina de partido. Sin entrar en cuestiones morales ni políticas, ¿es lícito expulsar de un partido a aquél que en conciencia ha votado distinto a las directrices de sus jefes políticos? A quién se debe ¿a su partido o sus electores?