Entre otras "perlas" del restaurante, su cocinera odiaba hacer cachopos, los camareros se hacían un lío al escanciar sidra y lo del siglo de historia y el premio a su fabada no era tan cierto como sus dueños decían. Y todo ello delante de Nati, una dueña cansada de su equipo.
Tenía que ser de coña. Yo no invitaría a Chicote a mi restaurante para servirle fabada de bote. Es un ridículo asegurado. No me creo que no sea un montaje para la televisión.
Pues a mí la de Litoral me gusta. Aquí en el Mediterráneo, si no compramos esa, lo llevamos mal.
Eso sí, en mis visitas a Asturias (que son una o dos en toda mi vida), si no me meto en un chigre a calentarme con una manta de cachopo, o probar un buen pote, no he estado en Asturias, ...
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Tenía que ser de coña. Yo no invitaría a Chicote a mi restaurante para servirle fabada de bote. Es un ridículo asegurado. No me creo que no sea un montaje para la televisión.
Pues a mí la de Litoral me gusta. Aquí en el Mediterráneo, si no compramos esa, lo llevamos mal.
Eso sí, en mis visitas a Asturias (que son una o dos en toda mi vida), si no me meto en un chigre a calentarme con una manta de cachopo, o probar un buen pote, no he estado en Asturias, ...
#1 Coincido, en los realities hay más producción que realidad.