El año 2012 podría haber sido testigo de un cierto despegue para las ventas de coches eléctricos en España, habida cuenta de la presencia que han tenido en los medios durante todo el ejercicio y la incipiente oferta de modelos que ya existen a la venta. Con una cuota de mercado de turismos inferior al uno por mil del total, me temo que hablar de “despegue” resultaría claramente optimista.