Un confidencial no es una noticia, es un rumor, la versión de política, económica o social del cotilleo del vecindario. Lo que sucede es que hay un sector amplio de la audiencia que toma el confidencial acríticamente, como una noticia confirmada, y lo asume dentro de sus conocimientos. De esta forma se pueden crear sensaciones sin necesidad de tener fuentes y mucho menos de confirmarlas, porque el medio siempre se escudará en su naturaleza pero jugará el doble juego ante buena parte de su audiencia.
Comentarios
¿y este menéo? ¿es un confidencial? ¿eh?
El mejor ejemplo de confidencial basado en chascarrillos lo tenemos en El Confidencial Digital.