Tras la reciente visita de Cospedal, Pons también visita Asturias por primera vez en su vida política y afirma en referencia a Cascos, que según aprendió de éste, primero es el partido y luego son las personas. Respecto a las encuestas que tan mal situan al PP en Asturias las minimiza diciendo que el PP ganará en Asturias como en el resto de españa.
Utilizaron con Cascos la misma táctica que utilizan para todo: no hacer nada, dejar que pase el tiempo y recoger los frutos que caigan del árbol.Pues con Cascos os falló la técnica.
¿Es a mí el único que me parece que lo de la disciplina de partido esta es una burrada como una catedral y una patada a la democracia?
A veces da la sensación que esta gente ve el partido como una especie de religión o de dogma que no puede unos ni plantearse (lametablemente es una postura seguida por el 60% de los votantes españoles). ¡De fanatismos está lleno el mundo! lo único que nos faltaba es dejar que nuestras vidas las dirijan peronas que se mueven, como burros con orejeras, siguiendo unas normas creadas por otros.
Muy bien señor Pons, no estaba ni cerca de votar a su partido, pero ahora tengo muy claro que, como individuo pensante, existen las mismas posibilidades de que vote al PP que lo haga a un partido islamista que proponga imponer la sharia. Total, para tener algo “por encima de las personas”...
#3 Es totalmente lo contrario a la democracia, los partidos políticos no pueden ser una jeraquía tipo Iglesia Católica con un sumo pontífice, una ejecutiva cardenalicia, unos afiliados tipo sacerdodtes de pueblo y luego los seglares, votantes y simpatizantes.
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Utilizaron con Cascos la misma táctica que utilizan para todo: no hacer nada, dejar que pase el tiempo y recoger los frutos que caigan del árbol.Pues con Cascos os falló la técnica.
¿Es a mí el único que me parece que lo de la disciplina de partido esta es una burrada como una catedral y una patada a la democracia?
A veces da la sensación que esta gente ve el partido como una especie de religión o de dogma que no puede unos ni plantearse (lametablemente es una postura seguida por el 60% de los votantes españoles). ¡De fanatismos está lleno el mundo! lo único que nos faltaba es dejar que nuestras vidas las dirijan peronas que se mueven, como burros con orejeras, siguiendo unas normas creadas por otros.
Muy bien señor Pons, no estaba ni cerca de votar a su partido, pero ahora tengo muy claro que, como individuo pensante, existen las mismas posibilidades de que vote al PP que lo haga a un partido islamista que proponga imponer la sharia. Total, para tener algo “por encima de las personas”...
#3 Es totalmente lo contrario a la democracia, los partidos políticos no pueden ser una jeraquía tipo Iglesia Católica con un sumo pontífice, una ejecutiva cardenalicia, unos afiliados tipo sacerdodtes de pueblo y luego los seglares, votantes y simpatizantes.
¡¡¡¡como en orwell!!!!