El guardameta suplente de Suecia sufrió un duro castigo tras echar el balón al suelo en un rondo durante un entrenamiento. Johan Wiland tuvo que poner con el culo en pompa dispuesto a soportar los disparos de sus compañeros desde la frontal del área. Y se montó un lío enorme.
Comentarios
#0 ¿Por qué en Suiza?
Una pista: entradilla.