Publicado hace 10 años por barbarroja a phenomena.nationalgeographic.com

Algunas bacterias pueden evitar el efecto de los antibióticos tradicionales entrando en un estado de 'latencia', esperando a que los medicamentos desaparezcan del organismo. Estás células durmientes se llaman 'persisters'. El investigador Kim Lewis ha encontrado una prometedora formar de matar a los persisters con un antibiótico llamado ADEP4 que fuerza a dichas células a comerse las unas a las otras durante su fase de sueño. Aun sin probar en humanos, ha conseguido erradicar infecciones resistentes a antibióticos en ratones