Publicado hace 13 años por Ingenioso_Hidalgo a elperiodico.com

Octogenarios y nonagenarios están amasados con un barro especial; todo lo aguantan estos abueletes. Parecen criados con la kriptonita de Superman en lugar del correoso pan de centeno que anudó el lento transcurrir de la posguerra, tanto la mundial como la del Cara al sol. Resistentes, forjados en la paciencia...