Publicado hace 12 años por REDdeRED a constituyentes.wordpress.com

Fíjense ustedes cuál será mi torpeza que cuando vi en las puertas de los aeropuertos los vehículos blindados, la proclamación del estado de alarma y sacar de las reuniones sindicales a punta de vamos pa´lante a los controladores aéreos, exclamé: “¡ya están aquí!” Pero no, solo eran el bueno de Pepiño Blanco y el fontanero Rubalcaba librándonos del chantaje de los radicales trabajadores que no nos dejaban irnos de vacaciones. Dos héroes españoles mal pagaos. Preparando privatizaciones. Habría que darles la medalla del pelotazo...