Hace 16 años | Por --72708-- a actualidad.terra.es
Publicado hace 16 años por --72708-- a actualidad.terra.es

Aisha es tanzana y tiene 15 años. Está ingresada en el dispensario del campo de refugiados de Lugufu, el único lugar con atención médica que hay en 20 kilómetros. Llegó inconsciente, con mucha fiebre y delirando. Tiene malaria cerebral, la más agresiva y mortífera. Aisha recibe quinina intravenosa directamente en el cerebro. Es un tratamiento para casos severos porque la malaria ataca a las personas que, como ella, tienen desnutrición y carecen de defensas. Es una carrera contrarreloj.