Nieto de Gonzalo Torrente Ballester, Marcos Giralt Torrente, confiesa haber superado la rabia contra su padre, el pintor Juan Giralt, gracias a la escritura. "No concibo la literatura como refugio. Me interesa muchísimo la política y la realidad que vivimos me genera mucha frustración, pero eso es un territorio distinto. No me parece bien hacer política por medio de la literatura, porque entonces muere. La buena literatura es subversiva, pero no desde la coraza de una ideología."
Comentarios
Ya lo decía María Ostiz:
"Con una frase no se gana un pueblo
Ni con un disfrazarse de poeta
A un pueblo hay que ganarlo con respeto
Un pueblo es algo más que una maleta.
Perdida en la estación del tiempo
Esperando sin dueño a que amanezca..."
Creo que no es la política lo que mataría la literatura, sino el dogmatismo.
No, la literatura se muere si se hace basura con ella. Que la mayor parte del tiempo haya coincidido con que la política era basura es una discusión aparte.
Por ejemplo, cuando Carl Sagan escribía sobre el compromiso con la exploración espacial estaba haciendo política, aunque no del tipo más común.