Sarkozy, que aterriza hoy en Madrid, está tan contento de acompañar a su mediática esposa, Carla Bluni, a esta visita de Estado en la que se tratarán temas de importante calado político, pero que quedarán eclipsados por el desfile de Dior (probablemente) con el que deleitará la ex-modelo a los cientos de cámaras con embrujadas con su palmito. ¡Semos asín!
Comentarios
¿Obama?
¿Un hombre? Yo pensaba que era un gremlins