Activistas del grupo letón 4ATA, que reivindican el robo de más de 7,4 millones de ficheros desde la base de datos del Servicio de Ingresos Públicos (SIP), acusan al Gobierno de Letonia de haber vendido armas a piratas somalíes en los años 90. Relacionada: Un 'Robin Hood virtual' pone en jaque a bancos y empresas estatales en Letonia