Hace 11 años | Por --354964-- a laverdad.es
Publicado hace 11 años por --354964-- a laverdad.es

Insisten una y otra vez y resulta difícil escapar de ellos sin meter la mano en el monedero y sacar alguna moneda, que se suma a la que previamente ha habido que desembolsar en la máquina que gestiona la tramitación de permisos para estacionar en la conocida como zona ORA o azul. Son los llamados 'gorrillas', que estos días han multiplicado su presencia en los aparcamientos en superficie más próximos a las calles del centro.

Comentarios

SuperCoccus

El problema son los gorrillas que exigen dinero a cambio de la seguridad de que no va a rayar tu coche, que tristemente son la mayoría de los que yo conozco.

Los hay que simplemente se quedan esperando a que les des algo y no dicen nada, pero lo más normal, o por lo menos donde yo vivo, más de uno te suelta improperios si le dices que no.

Yo he tenido que sufrir el tener que buscar aparcamiento en zonas "engorrilladas" y por negarme a dar dinero, me han insultado, amenazado e intimidado. Intenté denunciarlo, pero la policía tiene las manos atadas.

Y ojo, parece que a dos de los que yo veo todos los días al lado de mi facultad (los del turno de mañana, porque sí, la calle tiene horarios de explotación....) no les tiene que ir tan mal, porque desde el año pasado se gastan unos smartphones la mar de cucos.

D

Si hablamos de las personas que están en lo más bajo de la estructura social, yo pienso que es más triste pedir que robar. Cuando pides renuncias absolutamente a toda tu dignidad, pierdes hasta el último atisbo de tu libertad, ya que cifras el precio de tu supervivencia en la voluntad ajena, en el capricho del que tiene más que tú y que se siente con derecho a decidir cuánto da, a quién y si lo merece o no, convirtiendo la solidaridad en una de las más formas más reprobables de intercambio comercial, porque el que nada tiene se ve obligado a ceder hasta sus derechos más inalienables a cambio de la caprichosa generosidad de un desconocido.

Al menos cuando robas conservas la libertad y la voluntad. No intactas, desde luego, porque a esas situaciones no suele llegarse por gusto, pero sí con mayor fuerza que el que se ve obligado a mendigar por aquello a lo que todo ser humano debería tener derecho por la sencilla razón de haber nacido: una vida digna.

Tienen razón los que dicen que los gobiernos y sus fuerzas de seguridad y control social deberían hacer algo. Pero a los que están en lo más alto de la piramide, a la casta de ladrones (estos sí, ladrones de verdad y por gusto) que nos dominan, les conviene mucho que las cosas sigan así, que nos matemos entre nosotros y que de vez en cuando nos volvamos hacia ellos mendigando una versión espuria de lo que debería ser la verdadera justicia.

CTprovincia

#5 "Si hablamos de las personas que están en lo más bajo de la estructura social, yo pienso que es más triste pedir que robar. Cuando pides renuncias absolutamente a toda tu dignidad, pierdes hasta el último atisbo de tu libertad, ya que cifras el precio de tu supervivencia en la voluntad ajena, en el capricho del que tiene más que tú y que se siente con derecho a decidir cuánto da, a quién y si lo merece o no, convirtiendo la solidaridad en una de las más formas más reprobables de intercambio comercial, porque el que nada tiene se ve obligado a ceder hasta sus derechos más inalienables a cambio de la caprichosa generosidad de un desconocido."

Excelente.

j

Este sí que es un impuesto revolucionario.

Kazhar

¿Para cuándo una ley de reincidencia? Ley de 3 strikes, 3 faltas leves pasan a ser una grave. A la tercera vez que se pille a esta escoria extorsionado gente en espacios públicos, dos años de cárcel y cada vez que se le pille de nuevo, posteriormente a esta condena se incremente el tiempo en prisión. Así se acabarían, no sólo los gorrillas sino los rateros que entran 50 veces detenidos en la comisaría y salen siempre impunes.

TheEconomista

Y la policía no hace nada por controlarlo... es una verguenza que se permita la presencia de gorrillas en las ciudades. La culpa es nuestra por darles el dinero.

D

#2 lo que es una vergüenza cómo actuamos nosotros mismos.

Un palo bien dado resolverían muchos problemas

curaca

Yo cuando me piden algo, no se lo doy, y como soy bastante grande, le digo, como al coche le pase algo, hayas sido tú o no, te pego una paliza. Oye pues funciona, nunca he tenido ningún problema con ellos.

D

¿La pregunta es,porque esto pasa en el sur,sobre todo y no en el norte?
#8 Excelente propuesta la tuya,pero no es muy válida para un tio canijo/normal cuando el gorrilla es un senegalés de 2 metros;a menos que tires de revolver.
esto lo tienen que resolver la presión social y las autoridades competentes.
20 centimos,dice uno que dá.por menos de 1 € te montan un pollo.