Hace 11 años | Por pirola a libertaddigital.com
Publicado hace 11 años por pirola a libertaddigital.com

Segunda día y segunda protesta a las puertas de la Cámara Baja tras los recortes anunciados por Mariano Rajoy a quien solicitan su "¡dimisión ya!".

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¡SE ACABÓ¡. ESPAÑA ESTÁ INTERVENIDA

Se acabó. Ya no hay nada que hacer. La casta parasitaria política ha vendido a los españoles a sus nuevos amos, los centro-europeos; y España es ya un barrio periférico pobre de Berlín.

El Banco de España ha perdido sus competencias monetarias y de control en favor del Banco Central Europeo. Los bancos rescatados habrán de presentar estadillos de saldos vivos semanales en Bruselas.

El subterfugio ha sido evidente: el rescate consiste en prestarle dinero a la banca para que devuelva sus préstamos —considerados deuda senior— a los bancos de la Europa Central a cambio de que España asuma la responsabilidad del monto total —avale— con el BCE —que es deuda súper-senior— a quince años con trece de carencia: es decir, a interés compuesto durante trece años, lo cual inflará como un globo el capital final a devolver. Anticipamos que, como garantía, todo el oro del Banco de España se trasladará al BCE. El oro: siempre el oro que hace brillar los ojos de los que acogotan al mundo desde que inventaron la banca.

En el gambito, suben los intereses de la deuda española por encima del 7%, mientras España pierde toda autonomía económica y monetaria. Todas las medidas de recorte se dictarán desde Bruselas. Ya os advertimos desde Ácratas, amigos lectores, que de Guindos era un trilero baqueteado en quiebras —Lehman Brothers— y que estaba en el Gobierno para asumir la tarea de entregar España a sus acreedores. Y es lo que ha hecho.

España es una nueva Grecia, así que ya conocéis el camino que seguirán todos los españoles hacia el matadero: despido de funcionarios, bajadas generalizadas de sueldos, aumentos de impuestos indirectos —como el IVA o el impuesto sobre los combustibles—, bajada de pensiones, paro, miseria, destrucción social y violencia callejera generalizada como respuesta al terrorismo de este Estado pilotado por unos meros títeres del Poder Global.

El sinvergüenza de Montoro, ministro de Hacienda, ha dicho claramente que subirá inmediatamente el IVA —en el Consejo de Ministros del viernes próximo— y pasará al tipo más alto los alimentos básicos. Aduce el orejón que lo hará obligado "porque hay muchos que no pagan IVA". Debiera haber dicho la verdad: sube el IVA para compensar que hay muchos amigos suyos que no pagan impuestos de ninguna clase: son los ricos de España, con sus SICAV y sus movimientos de capitales a paraísos fiscales. El cerdo de Montoro acaba de llamar públicamente imbécil al que pague IVA, pues, en vez de perseguir a los que no pagan, recarga a los que sí lo hacen. Nadie ha dado nunca mejor razón para que nos pasemos todos al lado oscuro de la economía.

¿Y la Iglesia Católica? ¿Defiende acaso a los damnificados, a las víctimas? Pues no. Su canal de televisión, Intereconomía, es el más beligerante think tank contra los más pobres, y tiene la desfachatez de culpar de la crisis, creada por los cleptócratas banqueros y los políticos, a los propios parados, "porque no quieren trabajar". La Iglesia se ha quitado la careta del buenismo: forma parte del Poder Global y no quiere perder dividendos en esta organizada matanza de pobres.

La intervención oficial de España de hoy mismo —usen los eufemismos que usen es una palmaria intervención— es lo que han logrado primero el PP, metiéndonos en la Moneda Única (con aquella espectacular subida de precios de un 66%); luego el PSOE, inflando cuanto pudo la burbuja inmobiliaria y del crédito a base de tomar al asalto las cajas de ahorros; y ahora el PP, desmigando todos los logros sociales de 70 años de obrerismo. Estos castrados hijos de puta han cometido su felonía fiel y ordenadamente en benefico de su dueña, la Sinarquía Financiera Internacional que reside en la City sin Ley de Londres y está formada por esos mismos bancos que provocaron toda la crisis mundial manipulando el LIBOR y el EURIBOR para mantener los tipos bajos e inflar el crédito.

Si España hubiera tenido unos cuantos españoles con dignidad en el Gobierno, en vez de la caterva de criminales que tenemos, nos hubieran sacado del Euro inmediatamente, a mata caballo un domingo por la noche, con lo que toda la deuda hubiera quedado enjugada en pocos días. Y estos criminales lo saben, y lo ocultan; o ni siquiera lo saben, y nos venden a ciegas, por treinta monedas de plata.

Españoles con dignidad: A todos estos canallas, políticos y banqueros, ni el pan ni la sal. Vayamos a por ellos hasta el final, pues ésta es una lucha a muerte en la que la mayor parte de los muertos los pondremos nosotros. Tomemos ejemplo de los mineros de Asturias, León y Aragón. La lucha, a partir de ahora, está en las calles, no en los despachos de abogados que se querellan contra los banqueros estafadores de la CAM, Bankia o Catalunya Caixa, los mismos que desfalcaron sus entidades arropados por Miguel Ángel Fernández Ordóñez desde el Banco de España. Recordad que al delincuente Sáenz, segundo del mafiosos Botinone, lo indultó Zapatero en el último Consejo de Ministros de su repugnante carrera política. Ya habrá tiempo luego para que los ladrones y los traidores sean juzgados por un Tribunal Penal Popular y acaben colgados de las farolas de la Castellana como los genocidas asesinos.

ÁCRATAS

Kantinero

#2 Me estoy preguntando desde la ignorancia económica que si al final no será mejor que nos controle Europa???

Al fin y al cabo en España se ha dado la peor de las circunstancias politico-banqueros controlando las cajas y gastandose la pasta en Papas, ciudades de la luz, terras míticas Urdangarines y demás,
Tal vez el control ejercido desde Europa evite todo esto ya que tenemos a los ladrones en casa?

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#3 ¿ y si nos controlamos nosotros mismos a través de un sistema democrático donde los políticos estén a nuestro servicio y no al de la oligarquía financi9era?, piensalo...se puede hacer

Kantinero

Vale, pero salen todos ya colocados-

En muchos casos en empresas que ellos mismos privatizaron.