Para Agamben, el que ya nadie repare en ese doble sentido de la democracia, deriva en el "dominio aplastante del gobierno y de la economía sobre una soberanía popular progresivamente vaciada de sentido", al que asistimos hoy.
Democracia 2.0 ya. No hay quiero votar partidos políticos cada 4 años, que siempre incumplen lo que dicen sus "programas", quiero votar proyectos concretos (volver a habilitar el impuesto de patrimonio, por ejemplo) y que dichos proyectos no puedan ser modificados por el político de turno.
Comentarios
Para Agamben, el que ya nadie repare en ese doble sentido de la democracia, deriva en el "dominio aplastante del gobierno y de la economía sobre una soberanía popular progresivamente vaciada de sentido", al que asistimos hoy.
Buena frase.
Democracia 2.0 ya. No hay quiero votar partidos políticos cada 4 años, que siempre incumplen lo que dicen sus "programas", quiero votar proyectos concretos (volver a habilitar el impuesto de patrimonio, por ejemplo) y que dichos proyectos no puedan ser modificados por el político de turno.