España está bien como está: cortijo de pícaros sin moral, ladrones a espuertas, tricornios sin bozal, payasos institucionales, sotanas mugrientas, rencorosos a jornal, prevaricadores, chapuceros, crueles hasta el sadismo con el débil y serviles hasta la náusea con el poderoso. Es la España que nos está poniendo a las puertas de la independencia a vascos y catalanes (y ojalá gallegos) con mucha más celeridad de la que nunca soñaron Agirre, Maciá o Castelao
Comentarios
Quien mucho abarca, poco aprieta. Y estos hijos de la gran puta que gobiernan abarcan demasiado y en el peor momento. Se piensan que el pueblo aguantará todo, que su dictadura partitocrática soportará los envites de un pueblo hambriento y asqueado. Pero ya no hay más cojones de aguantar. Espero ansiosamente la indepencia de cualquier territorio del Estado para instalarme allí y renunciar a la nacionalidad que comparto con los mal paridos que nos han llevado a esta situación. España da asco. Desde Cataluña, desde Galicia, desde Euskadi y desde ambas Castillas