Hace 16 años | Por --55119-- a publico.es
Publicado hace 16 años por --55119-- a publico.es

Un guerrillero de las FARC se entregó a las autoridades colombianas con dos secuestrados que tenía a su cargo en el departamento de Nariño. Las personas hansido identificadas como John Pérez y Juan Carlos Bernal, secuestrados a mediados de 2006 en los departamentos de Guaviare (sur) y Valle del Cauca (suroeste), y por quienes el grupo armado exigía una gruesa suma de dinero a sus familias.

Comentarios

c

Sí sobre todo para los dos rehenes...LIBERTAD... y las FArc no parecen enterderlo. Colombia tiene una democracia, peor o mejor, pero democracia. Que dejen las armas y acudan a las urnas... si llegan al poder... suyo será mientras sean elegidos... Pero... lástima... se suelen convertir en pequeños dictadores... no entienden que la gente pueda vivir en libertad...

w

Secuestrar y maltratar inocentes no tiene ni justificación para la defensa de ninguna idea. Eso no tiene nada que ver con la "guerra" en que dicen estar; a la guerra sólo debe ir quien quiere ir, militares y/o voluntarios.

yatoiaki

Vaya, cuanto me alegro, al menos este ha sido capaz de pensar por si mismo y largarse a tiempo.

arhuaco

Esa es una noticia excelente.

b

#2 hombre, sin entrar en el tema de los secuestros, lo de "que acudan a las urnas" no vale. Vamos, simplemente porque es coger el asunto por los pies. Porque la toma de armas, la constitución de la guerrilla, es precisamente consecuencia de "haber querido ir a las urnas", porque como civiles los activistas de izquierda eran y son indiscriminadamente asesinados, desaparecidos y en general violentados por las fuerzas estatales y paraestatales. ¿Que Colombia es una democracia? Claro, hay un sistema parlamentario en el que probablemente no se falseen las elecciones, entre otras cosas porque está garantizado que, a dos metros bajo tierra, los revolucionarios no van a alcanzar demasiadas cotas de poder.

Y con esto no entro a justificar a las FARC, sino a identificar cuál es el poder persecutor, el que tiene verdaderos y grandes intereses que defender con las armas.