Un nuevo estudio realizado por psicólogos de la Universidad St. Andrews (Escocia) revela que tendemos a asociar ciertas formas del rostro masculino con la honestidad. Basándose en la teoría evolutiva de la selección sexual, los investigadores dedujeron que las caras masculinas pueden dar señales de mayor o menor dominancia física, y que “cuanto más dominante parece un hombre más propenso juzgamos que será a aprovecharse de la confianza de los demás para enriquecerse”. Siguiendo este razonamiento, es comprensible que seamos más desconfiados...
Comentarios
De los de cara ancha no sé, pero de los de cara dura si que no me fío un pelo.
Pensaba que esas teorias habian sido descartadas hacia decadas.
#2, aunque no estoy de acuerdo con las conclusiones precipitadas a las que llegan los magufos (afirmaciones totalmente carentes de base como que la gente con la nariz larga es chismosa, con la boca grande no sabe guardar secretos, y bobadas similares), creo que es cierto que:
(1) Algunas hormonas desempeñan un papel en determinar la forma de la cara y las facciones, y pueden condicionar también el comportamiento y la personalidad. Esto indica que puede haber una correlación entre ambas (la forma de la cara y el comportamiento).
(2) La forma del rostro (por ejemplo, más o menos atractivo, con o sin marcas, ...) puede influir en cómo te tratan los demás, y en tu autoconcepto, tu autoestima, y cómo te comportes con los demás.
Lo que pienso es que estas posibles diferencias a nivel estadístico no deberían llevarnos a prejuzgar a nadie, de la misma forma que las posibles diferencias estadísticas en comportamiento entre hombres y mujeres no deben llevarnos a prejuzgar a nadie por su sexo.