Hace 12 años | Por --163931-- a consumer.es
Publicado hace 12 años por --163931-- a consumer.es

La mayoría de los usuarios tenemos claves de acceso a los servicios que cualquier hacker podría romper en menos de diez minutos. Diez consejos sencillos para tratar de ponérselo difícil.

Comentarios

natrix

8. Guardar las claves en un documento de texto. Como las claves seguras son muy difíciles, por no decir imposibles, de recordar, lo lógico es guardarlas escritas en un documento de texto, que utilizaremos para almacenar las contraseñas de todos nuestros servicios. Cada vez que debamos entrar a un servicio, tendremos que recurrir a este documento. Puede que sea pesado, pero es más seguro.

Más seguro si no tienes un troyano o nadie te entra al ordenador.

Y si es un banco y se entera que la tienes apuntada, no te cubre el seguro, por ejemplo.

berzasnon

#1 El punto 9 comenta eso que dices y propone soluciones a esos problemas. Menos mal, porque una lista de consejos sobre contraseñas seguras que inluya apuntar las contraseñas en cualquier sitio, así, sin más, es una mierda de lista.

D

#1 Bueno, las claves se guardan en un documento de texto analógico, tipo libretita, vaya, y listo. Si viene el del banco la quemas, como en las pelis en b/n, en la chimenea delante del señor que te visita, porque seguro que vienen a tu casa a buscarla.

iramosjan

#1, #6 Eso ya lo cubre el meneo que no os habéis leido... Corto y pego

9. Guardar el documento en un lugar seguro. Hay varias opciones para guardar el documento con nuestras claves. La primera es usar una memoria USB separada físicamente del ordenador y que solo enchufemos cuando queramos abrir el documento con nuestras claves. Debemos ser conscientes de que podemos tener el ordenador monitorizado por algún software malicioso -ocurre con mucha más frecuencia de la que creemos- o que alguien puede acceder a través de la conexión wifi si esta no es lo bastante segura. La segunda alternativa es guardar el documento en una copia de seguridad en un servidor de la red, con protocolos de cifrado de 128 bits o más. Podemos guardarlo en plataformas diseñadas para tales usos, como Clipperz. Bastará con abrir este servicio y acceder al documento. Eso sí: la contraseña de acceso a Clipperz tiene que ser altamente compleja, deberemos tenerla escrita en una libreta, guardarla en un cajón y saber que si la perdemos también perderemos el resto de contraseñas.

s

#8 No. El artículo no lo cubre, especialmente no lo cubre la parte que has copiado, que consiste en una relación de todo lo que no se debe hacer.

Hay dos formas corrrectas de guardar los passwords, y ninguna de ellas se menciona.

D

Cerrar la sesión de los servicios a diario. Cuando apaguemos el ordenador por la noche o al salir de casa, la mejor opción es salir de todos los servicios de uso habitual, ya sean el correo electrónico, las distintas redes sociales donde participemos o las plataformas donde guardamos documentos para sincronizarlos, etc. Si alguien encendiera nuestro ordenador y no los hubiéramos cerrado, podría acceder fácilmente a tales servicios, ya que el navegador guarda las contraseñas si no le indicamos lo contrario. Por lo tanto, hay que indicar en el apartado de "Seguridad" de nuestro navegador que no recuerde ninguna contraseña. Al volver a usar el ordenador habrá que introducir todas las claves, pero evitaremos disgustos.

Este tío es tonto. ¿No será más sencillo proteger la sesión con una contraseña que hacer todo lo que recomienda aquí arriba?

v

Yo siempre uso el pin de la VISA: 1234

D

Si son claves de Internet, lo mejor es que sean fáciles de recordar o dificiles pero anotadas en papel (si es que no tenemos ningún riesgo de que algún pariente quiera usarlas), que no sean palabras ni en castellano ni en idioma conocido alguno, usar símbolos raros (la ñ incluída).

s

¿en un documento de texto?

Hay montones de programas que permiten guardar passwords encriptados y aportan varias funcionalidades muy útiles. Y gratis.