El tinerfeño Darío Dorta ha conseguido, a sus 35 años, la proeza más importante de su carrera deportiva. En cuatro días, ha recorrido 280 km a pié hasta llegar a la cumbre del Teide, sin dormir. Además, lo ha hecho mediante un trazado en espiral de especial complicación. Su objetivo recaudar fondos lucha contra el Cancer.
Comentarios
Pobre hombre... Sólo le faltaba quemarse a lo bonzo allí arriba...