El interventor Fernando Urruticoechea le cuenta a Jordi Évole que la corrupción en el ayuntamiento de Castro Urdiales en Cantabria está ligada a la construcción. Asegura que para que unos pocos se puedan llevan casi todo “hace falta que hayan migajas”, se refiere a los contratos del día a día, de basuras, jardinería… donde “todo el mundo pilla”. La corrupción en ese ayuntamiento está ligada a la construcción. “El mayor producto económico nace del urbanismo por eso se le llama la Marbella del norte”