El filósofo francés Gilles Deleuze decía que los publicistas eran los enemigos de los filósofos, y la acusación no es gratuita: mientras que la publicidad trabaja para el sistema -a través de su llamada al consumo busca reproducirlo-, la filosofía trabaja contra él, y lo hace, además, de una doble manera. En primer lugar, buscando propuestas en las que la justicia y el bien común alcanzan el mayor grado de expresión posible. Y segundo, identificando y analizando estructuras de poder, y buscando estrategias para desactivarlas.
Comentarios
"mientras que la publicidad trabaja para el sistema , la filosofía trabaja contra él"
Pues no ha conseguido ni el mas minimo exito.
#1 ¿A nivel histórico? ¿A día de hoy?
Precisa.
#2 Hasta ahora no ha conseguido nada, lamentablemente. Yo diria que ha sido mas bien al contrario, el sistema ha hecho trabajar a la filosofia a favor de él.
Otra vez, y no es por jugar: precisa.