Hace 11 años | Por edgard72 a elmalpensante.com
Publicado hace 11 años por edgard72 a elmalpensante.com

"Lleva unas cuarenta páginas de la novela cuando se topa con la palabra cigala. Sabe que la cigala es un crustáceo, pero, por la lógica de la frase, en la cual no hay cabida para la aparición de ningún crustáceo, comprende que la palabra debe de referirse a otra cosa. Se pregunta si es el caso de levantarse para agarrar el diccionario. Aborrece hacer eso, pero todo el párrafo parece descansar en esa palabra cuyo significado ignora. No le queda más remedio que ponerse de pie, ir al librero y coger el pesado volumen de la Real Academia. [...]"