Hace 14 años | Por kolunga a telesurtv.net
Publicado hace 14 años por kolunga a telesurtv.net

El campeón alemán de trineo David Möller se rompió un diente el pasado lunes al morder la medalla de plata que había ganado en los Juegos Olímpicos de Vancouver.

Comentarios

D

"No es dramático y no me duele"... eso es como cuando en plena vía pública, repleta de gente, te resbalas y te caes golpeándote toda la cancanilla (coxis, o hueso del culo). La reacción suele ser rebotar cuán pelota de caucho y poner buena cara, aquí no ha pasado nada, aunque por dentro rabies de dolor.

Conclusión (?!): nuestros deportistas están mejor nutridos que los alemanes. Nadal siempre muerte sus medallas/trofeos y eso no le pasa. ¡Que tomen nota!

D

#1 "muerde", no "muerte" / y el "eso" sobra (joder, esto de trabajar, almorzar, hablar con tu jefe y escribir en menéame mientras suena el teléfono y te mandan mensajes por el PSI a la misma vez... no va bien)

D

Lo que le paso al pobrecito es que sus entrenadores no le han enseñado a endurecer algo más que las piernas.
Ya que de todos es sabida la boca y por consiguiente la dentadura es parte esencial e importantísima del ser humano. lol lol lol

temu

ha comprobado que es buena

D

#3 Querrás decir que ha comprobado que es mala. La plata es blanda.

Ed_Hunter

Si es el campeón, ¿por qué tiene la medalla de plata?, y efectivamente #6 tiene razón, si fuese oro o plata pura se quedarían marcadas las huellas de los dientes, si se ha roto el diente es que era una mala aleación de plata. Por esa razón antiguamente, cuando las monedas eran de oro o plata, para comprobar si eran "buenas", se mordían y si no estaban duras, eran buenas, sino malas. Supongo que lo que le ha sucedido a #3 es que se había documentado en los cómics de Mortadelo y Filemón.

Borg

Si hubiese ganado la de oro tendría para reemplazar el diente.
Con la de plata solo tiene para unos empastes.

R

eso les pasa por no usar colgate accion total ^^

Brill

¿De verdad hace falta morder las medallas? A mí me parece que queda de un cutre espantoso en las imágenes de los ganadores de turno, verles a todos mordiendo las medallas como si creyeran que los organizadores les están estafando.