Avis le carga en la tarjeta de crédito un pago de más de 300$ por una supuesta ralladura en uno de sus coches de alquiler. Reclama y tras 7 meses de largas por parte de la compañía, decide contar en el blog las magníficas cualidades del departamento de atención al cliente de esta empresa.
Comentarios
Cada vez veo más claro que lo que falla no son las empresas, es la ley española.