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#1:
'Esta reacción, según asevera Álvarez, es común en toda Europa. “Ni se persiguen judicialmente, ni quien recibe los tartazos lo denuncia“. Un caso paradigmático es el de un exministro francés que recibió un tartazo. “Por el daño que esta acción causó a su imagen pública se impuso una indemnización de un euro, es decir, simbólica, al autor de la reivindicación. Y por este mismo hecho la fiscalía pide penas de prisión contra nosotros de entre 5 y 9 años y habla de atentado grave contra la autoridad“.'
#4:
Los tribunales de excepción nunca pueden ser imparciales.
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'Esta reacción, según asevera Álvarez, es común en toda Europa. “Ni se persiguen judicialmente, ni quien recibe los tartazos lo denuncia“. Un caso paradigmático es el de un exministro francés que recibió un tartazo. “Por el daño que esta acción causó a su imagen pública se impuso una indemnización de un euro, es decir, simbólica, al autor de la reivindicación. Y por este mismo hecho la fiscalía pide penas de prisión contra nosotros de entre 5 y 9 años y habla de atentado grave contra la autoridad“.'
Los tribunales de excepción nunca pueden ser imparciales.
No molesta el tartazo, sino que no hayan agachado su cabeza y se hayan limitado a depositar su papeleta cada cuatro años, papeleta que por supuesto debe corresponder con algún partido mayoritario o uno nacionalista afín a los ricos.
Qué gran libro, sobre el mismo tema:
http://www.akpress.org/pieanymeansnecessary.html
para saber más sin leer el libro:
http://en.wikipedia.org/wiki/Biotic_Baking_Brigade
Peligrosos terroristas armados con tartas y pancartas. Todo un desafío para el estado de derecho.
#0 A mí, desde Galicia, ninguna.
me gustara saber como acaba ese caso y el de barcenas y cia por poner uno de actualidad tambien
Ningún tartazo puede esconder el ánimo de lucro detrás del TAV a sabiendas del mal que están haciendo. Y menos después de lo de Santiago.
Ningún delito de tartazo armado podrá esconder el saqueo que está haciendo esta gente y su escasa responsabilidad a la hora de asumir hechos de su competencia.
Su impunidad se eleva hasta llegar a pedir penas de cárcel a quien les da un tartazo, a cuenta de invertarse el delito de tartazo terrorista. Mientras, saquean las arcas impunemente.
Se les ha olvidado poner en la foto a otro que también participó y que era teniente de alcalde en Arruazu. Nada menos. No sé qué nos parecería que un político del PP pegara un tartazo a una de IU, por poner un ejemplo.
Con todo, llevar eso a la AN es surrealista. Me ha recordado a lo de Èric Bertan.
#3 Seguramente no me parecería bien. Pero tampoco me parecería bien que pidieran 5 y 9 años de cárcel por ello.