Seguro que el título no sorprende a nadie. Lo que os va a sorprender es la conclusión del autor: los que trabajan duro y los que se llevan los beneficios sociales son respectivamente, los hijos y sus propios padres. ¿Quién lo había visto antes de esa manera?
El problema de todo esto es que cada vez ese grupo de los que "trabajan duro" es mayor mientras que el de los que se benefician va decreciendo, sin embargo la situación para los primero no parece revertir, únicamente con suerte y tiempo acaban pasando (unos pocos) a formar parte del grupo de los beneficiados.
A mí lo que me llama la atención del post es que es el clásico caso de un grupo social que "oprime" a otro, y sin embargo no es algo buscado o deseado por nadie (ningún padre normal quiere explotar a sus hijos) sino que ha sucedido como efecto secundario de otras decisiones políticas y sociales.
Comentarios
Buena reflexión. Intuyo que no será la última vez que la oiga/lea.
El problema de todo esto es que cada vez ese grupo de los que "trabajan duro" es mayor mientras que el de los que se benefician va decreciendo, sin embargo la situación para los primero no parece revertir, únicamente con suerte y tiempo acaban pasando (unos pocos) a formar parte del grupo de los beneficiados.
A mí lo que me llama la atención del post es que es el clásico caso de un grupo social que "oprime" a otro, y sin embargo no es algo buscado o deseado por nadie (ningún padre normal quiere explotar a sus hijos) sino que ha sucedido como efecto secundario de otras decisiones políticas y sociales.