Publicado hace 10 años por lanoticiaestaenlacalle a levante-emv.com

A principios de 2009, el entonces presidente Camps se puso el traje de Keynes y lanzó un plan de inversión en oabra pública en los municipios para reactivar la economía y reducir la cola de parados. La Generalitat aún arrastra pagos pendientes por un plan que ha dejado un reguero de facturas y desconfianza por el camino. Sólo en l´Horta, 17 municipios pequeños tuvieron que adelantar casi diez millones que asfixiaron sus arcas y obligaron a pedir prestado al ICO.