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#2:
Yo lo que hago cuando voy a un supermercado es llevar conmigo una lista previa de compra y solamente compro los productos que están anotados en esa lista. Ya me pueden poner todo tipo de reclamos e inventos, pueden hacer brujerías, que yo sólo compro lo que hay en la lista.
Para hacer la lista de compra primero consulto los folletos con las ofertas que los supermercados publican en Internet. Si el supermercado no está en Internet para mí es como si ese supermercado no existiese. Si no estás en Internet en el siglo XXI no existes. Una vez consultadas las ofertas en los folletos voy a comprar en los sitios que sean más baratos y tengan mejor relación entre calidad precio. Las cosas de bazar casi siempre las compro siempre en el LIDL porque allí las puedes devolver si una vez que las compras ves que no te gustan, te dan hasta 30 días para hacer devoluciones.
Hablando de aromas, la última vez que fui a un supermercado tenían la pescadería apestando. Estaban vendiendo potas y el pescadero me dijo que las potas huelen mal estando frescas. A mí me daban olor a podrido. Compré un pulpo descongelado. El pulpo era congelado y lo descongelaron para venderlo, lo avisaban con un letrero. A mí me pareció bien porque dicen que el pulpo hay que descongelarlo un par de días, o tres días, antes de cocinarlo. Lo cociné asustándolo, o sea, una vez que el agua está hirviendo agarré el pulpo por la cabeza y lo metí y saqué del agua tres veces, una, dos, y tres. Dicen que así no se desprende la piel mientras se cocina y quedan mejor. Lo tuve unos 50 minutos y lo hice a la marinera, pero a nadie le gustaba el pulpo a la marinera así que fui separando todos los pedazos del pulpo, los lavé con agua del grifo, puse aceite en un caldero, le eché ajos, pimentón, guindilla, hoja de laurel, sal, metí los pedazos del pulpo, los dejé unos 5 minutos hirviendo y luego casi se comen hasta la olla. El pulpo era tamaño XXL, pero al guisarlo quedó reducido a tamaño XL.
A mí a veces me gusta hacer de comer mientras estoy escribiendo en Menéame. Ahora, con Internet, cualquier gilipollas puede cocinar igual o mejor que cualquier cocinero profesional.
Eso del carrito es verdad, cuando iba a comprar al supermercado a mí me parecía que me iba a volver mariquita empujando el carro, pero luego me acostumbré y ahora todo el mundo usa los carros en los supermercados.
Para hacer la lista de compra primero consulto los folletos con las ofertas que los supermercados publican en Internet. Si el supermercado no está en Internet para mí es como si ese supermercado no existiese. Si no estás en Internet en el siglo XXI no existes. Una vez consultadas las ofertas en los folletos voy a comprar en los sitios que sean más baratos y tengan mejor relación entre calidad precio. Las cosas de bazar casi siempre las compro siempre en el LIDL porque allí las puedes devolver si una vez que las compras ves que no te gustan, te dan hasta 30 días para hacer devoluciones.
Hablando de aromas, la última vez que fui a un supermercado tenían la pescadería apestando. Estaban vendiendo potas y el pescadero me dijo que las potas huelen mal estando frescas. A mí me daban olor a podrido. Compré un pulpo descongelado. El pulpo era congelado y lo descongelaron para venderlo, lo avisaban con un letrero. A mí me pareció bien porque dicen que el pulpo hay que descongelarlo un par de días, o tres días, antes de cocinarlo. Lo cociné asustándolo, o sea, una vez que el agua está hirviendo agarré el pulpo por la cabeza y lo metí y saqué del agua tres veces, una, dos, y tres. Dicen que así no se desprende la piel mientras se cocina y quedan mejor. Lo tuve unos 50 minutos y lo hice a la marinera, pero a nadie le gustaba el pulpo a la marinera así que fui separando todos los pedazos del pulpo, los lavé con agua del grifo, puse aceite en un caldero, le eché ajos, pimentón, guindilla, hoja de laurel, sal, metí los pedazos del pulpo, los dejé unos 5 minutos hirviendo y luego casi se comen hasta la olla. El pulpo era tamaño XXL, pero al guisarlo quedó reducido a tamaño XL.
A mí a veces me gusta hacer de comer mientras estoy escribiendo en Menéame. Ahora, con Internet, cualquier gilipollas puede cocinar igual o mejor que cualquier cocinero profesional.
Eso del carrito es verdad, cuando iba a comprar al supermercado a mí me parecía que me iba a volver mariquita empujando el carro, pero luego me acostumbré y ahora todo el mundo usa los carros en los supermercados.
Comentarios
Yo lo que hago cuando voy a un supermercado es llevar conmigo una lista previa de compra y solamente compro los productos que están anotados en esa lista. Ya me pueden poner todo tipo de reclamos e inventos, pueden hacer brujerías, que yo sólo compro lo que hay en la lista.
Para hacer la lista de compra primero consulto los folletos con las ofertas que los supermercados publican en Internet. Si el supermercado no está en Internet para mí es como si ese supermercado no existiese. Si no estás en Internet en el siglo XXI no existes. Una vez consultadas las ofertas en los folletos voy a comprar en los sitios que sean más baratos y tengan mejor relación entre calidad precio. Las cosas de bazar casi siempre las compro siempre en el LIDL porque allí las puedes devolver si una vez que las compras ves que no te gustan, te dan hasta 30 días para hacer devoluciones.
Hablando de aromas, la última vez que fui a un supermercado tenían la pescadería apestando. Estaban vendiendo potas y el pescadero me dijo que las potas huelen mal estando frescas. A mí me daban olor a podrido. Compré un pulpo descongelado. El pulpo era congelado y lo descongelaron para venderlo, lo avisaban con un letrero. A mí me pareció bien porque dicen que el pulpo hay que descongelarlo un par de días, o tres días, antes de cocinarlo. Lo cociné asustándolo, o sea, una vez que el agua está hirviendo agarré el pulpo por la cabeza y lo metí y saqué del agua tres veces, una, dos, y tres. Dicen que así no se desprende la piel mientras se cocina y quedan mejor. Lo tuve unos 50 minutos y lo hice a la marinera, pero a nadie le gustaba el pulpo a la marinera así que fui separando todos los pedazos del pulpo, los lavé con agua del grifo, puse aceite en un caldero, le eché ajos, pimentón, guindilla, hoja de laurel, sal, metí los pedazos del pulpo, los dejé unos 5 minutos hirviendo y luego casi se comen hasta la olla. El pulpo era tamaño XXL, pero al guisarlo quedó reducido a tamaño XL.
A mí a veces me gusta hacer de comer mientras estoy escribiendo en Menéame. Ahora, con Internet, cualquier gilipollas puede cocinar igual o mejor que cualquier cocinero profesional.
Eso del carrito es verdad, cuando iba a comprar al supermercado a mí me parecía que me iba a volver mariquita empujando el carro, pero luego me acostumbré y ahora todo el mundo usa los carros en los supermercados.
#2 Pero QUÉ rollo has escrito?
#2 De surrealista que es tu comentario, me encanta!
"El hilo musical que acompaña a nuestras compras, a empresas en la que trabajan expertos en persuasión humana". Pues a mi el "Mercadooooona Mercadona" me invita a comprar en otro sitio.
#0 Muy buen hallazgo el meneo, cito dos lineas del mismo: "Walmart, cabe profundizar en cómo su política de precios es capaz de modificar todo el tejido económico de la región", "los salarios de Walmart son tan bajos que muchos de sus empleados dependen del Programa de Asistencia Nutricional".
Te agrego, que Walmart en el caso de mi país Argentina actúa en bloque junto a otras grandes cadenas de supermercados como Carrefour. Cuando llegaron hace muchos años, ponían los precios casi al costo hasta que fundieron a los pequeños supermercados argentinos y almacenes (Algo similar se señala en el artículo). Una vez que los fundieron, ganan más sobre los productos que venden que la empresas que fabrican los alimentos, o los productores de carne y vegetales. Ellos compran por decirlo sencillo 1 kilo de lomo a $30 a pagar en seis meses con cheque y lo venden a no menos de $80, lo mismo con los artículos de verduleria. Son una mafia, cada vez que aumentan algo en las paritarias el sueldo de los trabajadores, realizan un aumento del precio de los productos, anulando el el ingreso. Saludos!
Yo lo que odio, es cuando cambian las cosas de sitio, solo para marearte y empezar a dar vueltas y comprar de todo un poco, pero no!!!!!
Pues yo voy y compro toda la mierda que veo, soy de los tontos que pican.
Digamos NO a los titulares sensacionalistas que sólo buscan el click.
#2 Lonchafinista.
Por esa razón, algunos grupos importantes se ven obligados a editar dos discos: uno para vender en Walmart (debidamente autocensurado) y otro para comercializar en otras tiendas. Porque Walmart es como una nación en sí misma, con sus propias reglas y sus propios códigos morales: si no los acatas, puedes ser condenado al ostracismo.
Y la gente será tan idiota de comprar el de Walmart.
#7 Igual, en todos los países es lo mismo.
Me hace gracia que la gente "cree" artículos haciendo "copy & paste" de otros....
Buscad en google esta cadena y veréis a lo que hago referencia
"En muchos restaurantes de comida rápida se usa una fragancia llamada RTX9338PIS, o en su nombre completo: “fragancia de hamburguesa con panceta recién asada”."
#2 me he logueado para comentar y votar tu comentario