Las características más conocidas de Concavenator corcovatus son la presencia de una estructura similar a una joroba en la espalda, y unas protuberancias en el brazo que indican la presencia de plumas ancestrales. Pepito, como se conoce a este dinosaurio carnívoro de seis metros, está representado por un esqueleto prácticamente completo y articulado; un fósil singular que incluso preserva las escamas del pie y la cola. Un trabajo reciente, publicado en Cretaceous Research, presenta un completo estudio sobre su cráneo.
Comentarios
¿Pepito?, ¿en serio?, ¿para un dinosaurio de Cuenca?
Yo lo hubiera llamado Ceferino.
#1 además le falta la crema.
#2 Sí: la vaselina para poner a sus víctimas mirando para, ... ¡OH WAIT!
¿Para donde se ponen los de Cuenca cuando les ponen mirando para Cuenca?
#3 hay unos pasteles que se llaman pepitos.
#4 Ah, vale, no sé cómo he podido ser tan mal pensado, ...