Antes de ser ejecutado, José Luis Sánchez-Bravo pidió que su hija fuera educada en el marxismo-leninismo. Luisa, secretaria de la embajada de La Haya, acabó poniéndose de largo en el Palace y defendiendo al Estado español.
Con ese rechazo por conveniencias hacia su asesinado padre nunca podrá desplegar todas sus potencias. Es un bloqueo que la limita. Carece del valor y heroicidad de su padre. No es un fruto maduro ni podrido es un fruto vano. Pues mi admiración por ese luchador antifranquista.
Comentarios
Debe de ser una historia maravillosa, pero estoy de este tema hasta la polla.
#1 La verdad es que es una historia bastante peculiar. Creo yo.
Con ese rechazo por conveniencias hacia su asesinado padre nunca podrá desplegar todas sus potencias. Es un bloqueo que la limita. Carece del valor y heroicidad de su padre. No es un fruto maduro ni podrido es un fruto vano. Pues mi admiración por ese luchador antifranquista.