Hace 3 años | Por vaucason a thelinebreaker.net
Publicado hace 3 años por vaucason a thelinebreaker.net

El deporte, para los países comunistas, era una cuestión de Estado. Se invertía una considerable cantidad de dinero no solo en fomentarlo, sino también en crear atletas de alto rendimiento, ya que sus líderes habían entendido (gracias, en buena medida, a las experiencias fascistas y nazistas) que los triunfos era una buena publicidad para ellos y sus gobiernos, más en épocas donde comenzaba a latir con fuerza la Guerra Fría.