Cuando una enfermedad causa inquietud pública, nunca falta quien aprovecha la confusión para publicitar sus disparates. En este caso, la enfermedad es el enterovirus, el oportunista es Josep Pàmies y el disparate es el MMS, siglas que aluden al ridículo nombre -Mineral Miracle Solution- de un desinfectante industrial al que quieren disfrazar de panacea universal.
Comentarios
Qué cosas más raras siembra la gente
Curiosamente las mismas explicaciones que se dan para negarlo se dan para explicarlo.