Publicado hace 6 años por pascuadsl a blogs.elconfidencial.com

Quienes, quizá por deformación profesional, practicamos la cautela de no opinar acerca de las resoluciones judiciales sin haberlas leído, y aun habiéndolo hecho dudamos en su valoración, no dejamos por ello de comprender que, con o sin lectura previa, inmediatamente se alcen voces contra un fallo judicial que, por sus circunstancias o por sus consecuencias, pueda considerarse atentatorio contra determinados valores más o menos asumidos colectivamente.