Hace 4 años | Por --612312-- a lavanguardia.com
Publicado hace 4 años por --612312-- a lavanguardia.com

La izquierda portuguesa intentará este viernes rescatar la ley de gestación subrogada, que volverá al Parlamento tras quedar sin efecto el año pasado porque el Tribunal Constitucional anuló varios artículos cuando ya estaba en vigor. Con el apoyo seguro del Bloque de Izquierda (BE), impulsor de la medida, y de la mayoría del Partido Socialista, a priori el destino de la ley dependerá del Partido Social Demócrata (PSD, centroderecha), por lo que los augurios no son positivos.

Comentarios

L

Permitir la reproducción a través de contratos de vientres de alquiler me parece un sucio negocio, una transacción de vidas de estos tiempos de hipercapitalismo.

pepepoi

#6 debe ser eso, la bipolaridad. De hecho la izquierda portuguesa es la que está a favor de la gestación subrrogada mientras que la izquierda podemita dice que eso es una barbaridad.
Por cierto, no entiendo que estar a favor o en contra sea cosa de derechas o izquierdas.

L

Esta gestión de bebés trata un nuevo tipo de esclavitud: paridoras por un sueldo y a los/las bebés como meros productos de un convenio.

D

#2 todo el mundo es esclavo del dinero

j

#4 no insistas, hay gente que vive en la bipolaridad, y no va a cambiar, aun te falto lo de "el bikini es opresión pero el hijab libertad"

R

Afortunadamente en Portugal gobierna la auténtica y verdadera izquierda marxista anticapitalista, que jamás permitiría... oh wait.

L

Es cosa de tener mucho dinero. Los vientres de alquiler son ilegales en casi todo el mundo, menos EEUU, Reino Unido en algunos casos y otros pocos paises. Como el negocio del tráfico de animales en peligro de extinción, valga tan rara comparación, se trata de una venta carísima, sólo para gente rica.
No sólo es la explotación de seres humanos, además, conseguir este 'producto' legalmente, o,sea, un bebé, cuesta en torno a unos 50.000 € y los 200.000 €, dependiendo del país en el que se lleve a cabo.

L

“Los niños/as no son bienes o servicios que el Estado puede garantizar o proporcionar. Son seres humanos con derechos.”
(Maud de Boer-Buquicchio, relatora especial de la ONU sobre la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía)

L

Lo que me parece degradante es comparar a una fontanera con una paridora profesional, una vasija humana.