Hace 6 años | Por holaquease a ara.cat
Publicado hace 6 años por holaquease a ara.cat

La Audiencia Nacional comenzó a poner el foco en Abdelbaki esSatty a finales de 2005, en el marco de una investigación en la célula terrorista Grupo Islámico Combatiente Marroquí. Este procedimiento judicial investigaba la trama española implicada en los atentados de mayo del 2003 en Casablanca, en Marruecos. En septiembre de 2005, la unidad de información exterior de la Policía Nacional alertó que se había detectado que Se Satty tenía "numerosos contactos" con algunos detenidos de la investigación.

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holaquease

La Guardia Civil entregó en febrero de 2008 en la Audiencia Nacional un informe "final" sobre la documentación de la operación Chacal. En noviembre de 2007, el juez Baltasar Garzón había ordenado al cuerpo policial hacer un análisis del material intervenido en esta operación. Uno de los puntos de la petición de Garzón pedía elaborar un informe sobre Abdelbaki se Satty, que unos años más tarde sería el imán de Ripoll y el cerebro del grupo terrorista que ha acabado atentando en Barcelona y Cambrils. Cumpliendo la orden del juez, hace nueve años la Guardia Civil investigó la documentación obtenida de EsSatty y la escucha telefónica -ya que se le había pinchado el móvil- para determinar qué relación tenía con una célula yihadista. En la conclusión del informe, al que ha accedido el ARA, la Guardia Civil descartó que Se Satty participara en la red islamista de reclutamiento. La Policía Nacional también sospechaba que, aparte del teléfono pinchado, tenía otro número que no localizaron.

La Audiencia Nacional comenzó a poner el foco en Abdelbaki esSatty a finales de 2005, en el marco de una investigación en la célula terrorista Grupo Islámico Combatiente Marroquí. Este procedimiento judicial investigaba la trama española implicada en los atentados de mayo del 2003 en Casablanca, en Marruecos. En septiembre de 2005, la unidad de información exterior de la Policía Nacional alertó que se había detectado que Se Satty tenía "numerosos contactos" con algunos detenidos de la investigación. "No se descarta que pudiera actuar como intermediario a la hora de dar apoyo logístico a las redes terroristas, manteniendo contactos con individuos árabes que se dedican a falsificar documentación con el objetivo de dar salida a la cobertura de elementos terroristas", avisó a la Policía Nacional, que solicitó que se pinchara el teléfono de es Satty.

En octubre de 2005 la Audiencia Nacional permitió intervenir el móvil de Es Satty por las "sospechas fundadas" sobre su vinculación con el grupo terrorista Ansar al Islam. Su número estuvo pinchado entre el 19 de octubre y el 22 de noviembre de 2005, hasta que la Policía Nacional pidió detener la escucha para que, en este mes de intervención telefónica, no se había podido obtener información "relevante para la investigación ". "Y sabiendo la utilización de los teléfonos para concretar citas y reuniones por parte de este individuo, entendemos que tiene otro número telefónico sin que de momento se tenga conocimiento", advirtió el cuerpo policial sobre Es Satty. Pero este otro teléfono, que habría permitido avalar la tesis de la policía sobre su implicación, no se llegó a localizar, ya que no consta en el sumario del caso.

"Posiblemente drogas"

Al cabo de dos años, en 2007, fue cuando Garzón ordenó a la Guardia Civil que analizara el material conseguido en todo el procedimiento judicial. Entonces ya se habían hecho con los registros en domicilios de Vilanova y la Geltrú, entre otras localidades, en el marco de la operación Chacal. Se Satty vivía en el mismo piso de uno de los detenidos en Vilanova en 2006, y entre el material obtenido de la vivienda y la escucha telefónica, la Guardia Civil estableció que el imán de Ripoll no era pariente de un arrestado en la operación, con el mismo apellido que él. El informe de 2008 añadió que Abdelbaki se Satty tenía antecedentes por una detención en Ceuta "por un presunto delito fiscal, posiblemente drogas, por el que no llegó a ingresar en prisión". La investigación policial no precisó el delito, aunque ahora se ha sabido que EsSatty fue condenado por haber intentado introducir en España de manera ilegal una persona que viajaba con un pasaporte falsificado. Ante esta falta de concreción, el juez descartó acusó Se Satty en la causa que estaba abierta.

Y es que la Guardia Civil también dijo en el informe que "por informaciones de inteligencia" se sabía que otro detenido había entregado dinero en Es Satty para pagar una furgoneta, para que pudiera utilizarla para "pasar compatriotas de manera ilegal de Marruecos en España ". Pero la investigación no aportó nada más sobre este hecho. Del teléfono pinchado, el cuerpo policial se limitó a señalar con quien había contactado Se Satty y de quien había recibido llamadas. Así, la Guardia Civil concluyó sobre él: "A pesar de que hay una relación directa con algunos integrantes de la célula desarticulada, no se ha observado que exista una vinculación con la red de reclutamiento". Para justificarlo, argumentó que, hace nueve años, no se había detectado Se Satty en reuniones o negocios del grupo terrorista, "ni indicios de participación relevantes en acciones de captación o de adoctrinamiento de adeptos para la causa islamista investigada ".

Catacroc

Hasta que no tengamos a los precog estas cosas seguiran pasando.

D

El ARA le quiere encular los muertos a la GC. que majos son, son unos enculamuertos.