Se celebraron en parte en uno de los barrios más pobres de la capital, Stratford. La promesa estaba clara: la cita olímpica serviría "directamente" para mejorar las condiciones de sus habitantes, con miles de alojamientos nuevos, principalmente sociales, que serían vendidos a precios "asequibles". Narjiss consiguio un apartamento de protección oficial a 600 libras, tras 18 años de espera. Empezó pagando 1.000 libras, después 1.400, y aumentó a 1,800 libras cuando ella se fue hace dos años. "Los principales beneficiados son gente acomodada".
Comentarios
Que esperabais, las olimpiadas, mundiales, expo, etc...Valen para que unos pocos hagan negocio. Miles de millones a la
basura, bolsillos de algunos...¡A los pobres siempre se la cuelan! Aunque Stratford siga siendo una mierda, aunque tenga el shopping center.