Maik B. ha sido durante meses Juez de lo Cvil en la Alta Franconia (Baviera) a pesar que la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (agencia de inteligencia policial del Gobierno Federal alemán) le conocía músico de extrema derecha bien conectado en el ambiente. Están a punto de echarle, pero este caso no se olvidará tan rápidamente en Baviera. Enlace alternativo en inglés: http://www.thelocal.de/20141014/far-right-magistrate-embarrasses-bavarian-justice
#0 Edita el titular o te votarán sensacionalista o errónea, el artículo dice que es de extrema derecha, no neonazi. Además, sin oír la canción de Hitler no sabemos si en ella le insultan o le glorifican.
Juez bajo sospecha de neonazismo: los contactos de la derecha extrema de Maik B.
De Conny Neumann y Wolf Wiedmann-Schmidt
Maik B. ha sido durante meses Juez de lo Civil en la Alta Franconia (Baviera) a pesar que la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (agencia de inteligencia policial del Gobierno Federal alemán) le conocía como músico de extrema derecha bien conectado en el ambiente. Están a punto de echarle, pero este caso no se olvidará tan rápidamente en Baviera.
Múnich/Hamburgo - El martes Clemens Lückemann debe hacer un interrogatorio, que no es de lo cotidiano para este juez con experiencia: Ante del presidente de la Audiencia Provincial de Bamberg no estara ningun testigo ni imputado, pero un representante de su propio oficio: Maik B, juez de lo civil en la Audiencia Municipal de Lichtenfels en la Alta Franconia.
Maik B. debe aclarar preguntas acerca de su pasado, de su vida antes de ocupar el cargo público y sobre sus convicciones políticas. El Ministerio de Justicia podrá después comparar sus declaraciones con los numerosos registros creados por la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (Verfassungsschutz) acerca del pasado de Maik B.: El hombre de 29 años se conoce bien por los servicios de seguridad por su actuar en ambientes de extrema derecha.
El ministro de justicia Winfried Bausback (CDU) ya declaró que se vaya a actuar "si se afirman las acusaciones".
Pero ocurra lo que ocurra, aún queda la gran pregunta: ¿Cómo ha sido posible que un extrema-derechas obtuvo el cargo de Juez y podía ejercer durante meses?
Runas de la SS en el logo de la banda.
Según informaciones de SPIEGEL ONLINE, sí existía en Baviera conocimiento detallado sobre los antecedentes de Maik B.: El 26 de Febrero de este año, la división de Brandeburgo del Verfassungsschutz envío a sus colegas bávaros un "aviso de reconocimiento" acerca del "cambio de residencia de un músico de orientación de extrema derecha" a la comarca de Kulmbach. Aquél tendría "contactos extensos" en la escena neo-nazi alemana e internacional, según el documento.
Los servicios de seguridad de Brandeburgo sabían de quién estaban avisando - ya le conocían a Maik B. desde hace más de diez años. Su proyecto musical "Hassgesang" (canto del odio) fue declarado por el Verfassungsschutz local como "el brazo músicial alargado de la escena neo-nazi en Brandeburg del Sur".
Así la red neo-nazi "Spreelichter" (luces de la Spree), también conocido como "movimiento de resistencia Brandeburg del Sur", aprovechó un recital del canto de Maik B. para su propaganda en Internet: un video grabado en la penumbra para transmitir un ambiente de clandestinidad.
Cuando fue prohibido el "movimiento de resistencia" por el ministerio de interior de Potsdam en Julio 2012, una de las razones de prohibición fue el vínculo estrecho entre la red de extrema derecha y "Hassgesang" - aparte del "parentesco espiritual" con el nacionalsocialismo y la referencia a "personalidades del tercer reich".
En la orden de prohibición, de la cual SPIEGEL ONLINE tiene una copia, se describe el proyecto del lider de banda Maik B. como "conocido por sus letras rascistas e incitantes a la xenofobia". También está impreso el logo de "Hassgesang" con las runas de la SS en la mitad de la palabra.
Maik B. se descubrío por casualidad.
Maik B. había intentado de defenderse jurísticamente contra una registro domiciliaro en relación con la prohibición, pero la Audiencia Provincial Berlin-Brandeburg declaró en enero de 2013 que B. habría de considerarse como "el que movía los hilos" en el "movimiento de resistencia Brandeburg del Sur".
Pero los agentes del Verfassungsschutz no pudieron parar la carrera del joven jurista con notas excelentes: La justicia bávara no se enteró de la correspondencia entre Potsdam y Múnich. B. ocupó su cargo en Lichtenfels en el otoño de 2013.
Los agentes del Verfassungsschutz bávaro simplemente habían desaprovechado la ocasión para investigar que ocupación seguía el recién llegado extrema-derecha.
Al final se entregó el joven juez él mismo a las instituciones. Debido a un supuesto robo en su taquilla, B. puso una denuncia con la policía de Bayreuth. Allí un investigador se enteró por casualidad que el jurista lleva el mismo nombre que un neo-nazi bajo vigilancia del Verfassungsschutz. Una comprobación de datos determinó que el juez B. es el anterior cantante principal de varios grupos de música neo-nazi.
El ministerio de Justicia bávaro recién el jueves obtuvo conocimiento de los antecedentes del colega de Lichtenfels y ahora está pidiendo un informe detallado de los agentes del Verfassungsschutz sobre B., pero también acerca del porqué nunca les fue señalado el contexto extremista del juez.
En su contratación B. tuvo que rellenar un cuestionario acerca de su fidelidad por la constitución, pero al parecer no era del todo verídico. Aquellas declaraciones falsas ahora podrían facilitar anular el nombramiento de B., como aseguró el ministro de justicia Winfried Bausback.
Pero de todas formas, el caso no está resuelto, ni para los agentes del Verfassungsschutz, ni para el gobierno bávaro.
La oposición de la asamblea bávara está pidiendo enérgicamente la aclaración del asunto. La CSU por su parte, emprende una huida hacia delante. Tanto el ministro de interior Joachim Herrmann como el ministro de justicia Bausback quieren reintroducir el denominado "decreto de radicales", por lo menos para la contratación de jueces y fiscales.
Esto implicaría que la justicia pudiése preguntar al Verfassungsschutz por informaciones generales de cualquier solicitante.
Comentarios
#0 hecharle -->echarle
#1 gracias, siempre me confundo con esto...
#3 En el verbo echar, lo primero que se echa es la hache
Pues yo no veo democrático vetar a alguien por su ideología. Si no ha cometido ningún delito, es igual que sea neonazi, stalinista o masón.
por lo menos el chaval ha salido estudioso
¿fiabilidad alemana?
#0 Edita el titular o te votarán sensacionalista o errónea, el artículo dice que es de extrema derecha, no neonazi. Además, sin oír la canción de Hitler no sabemos si en ella le insultan o le glorifican.
Juez bajo sospecha de neonazismo: los contactos de la derecha extrema de Maik B.
De Conny Neumann y Wolf Wiedmann-Schmidt
Maik B. ha sido durante meses Juez de lo Civil en la Alta Franconia (Baviera) a pesar que la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (agencia de inteligencia policial del Gobierno Federal alemán) le conocía como músico de extrema derecha bien conectado en el ambiente. Están a punto de echarle, pero este caso no se olvidará tan rápidamente en Baviera.
Múnich/Hamburgo - El martes Clemens Lückemann debe hacer un interrogatorio, que no es de lo cotidiano para este juez con experiencia: Ante del presidente de la Audiencia Provincial de Bamberg no estara ningun testigo ni imputado, pero un representante de su propio oficio: Maik B, juez de lo civil en la Audiencia Municipal de Lichtenfels en la Alta Franconia.
Maik B. debe aclarar preguntas acerca de su pasado, de su vida antes de ocupar el cargo público y sobre sus convicciones políticas. El Ministerio de Justicia podrá después comparar sus declaraciones con los numerosos registros creados por la Oficina Federal para la Protección de la Constitución (Verfassungsschutz) acerca del pasado de Maik B.: El hombre de 29 años se conoce bien por los servicios de seguridad por su actuar en ambientes de extrema derecha.
El ministro de justicia Winfried Bausback (CDU) ya declaró que se vaya a actuar "si se afirman las acusaciones".
Pero ocurra lo que ocurra, aún queda la gran pregunta: ¿Cómo ha sido posible que un extrema-derechas obtuvo el cargo de Juez y podía ejercer durante meses?
Runas de la SS en el logo de la banda.
Según informaciones de SPIEGEL ONLINE, sí existía en Baviera conocimiento detallado sobre los antecedentes de Maik B.: El 26 de Febrero de este año, la división de Brandeburgo del Verfassungsschutz envío a sus colegas bávaros un "aviso de reconocimiento" acerca del "cambio de residencia de un músico de orientación de extrema derecha" a la comarca de Kulmbach. Aquél tendría "contactos extensos" en la escena neo-nazi alemana e internacional, según el documento.
Los servicios de seguridad de Brandeburgo sabían de quién estaban avisando - ya le conocían a Maik B. desde hace más de diez años. Su proyecto musical "Hassgesang" (canto del odio) fue declarado por el Verfassungsschutz local como "el brazo músicial alargado de la escena neo-nazi en Brandeburg del Sur".
Así la red neo-nazi "Spreelichter" (luces de la Spree), también conocido como "movimiento de resistencia Brandeburg del Sur", aprovechó un recital del canto de Maik B. para su propaganda en Internet: un video grabado en la penumbra para transmitir un ambiente de clandestinidad.
Cuando fue prohibido el "movimiento de resistencia" por el ministerio de interior de Potsdam en Julio 2012, una de las razones de prohibición fue el vínculo estrecho entre la red de extrema derecha y "Hassgesang" - aparte del "parentesco espiritual" con el nacionalsocialismo y la referencia a "personalidades del tercer reich".
En la orden de prohibición, de la cual SPIEGEL ONLINE tiene una copia, se describe el proyecto del lider de banda Maik B. como "conocido por sus letras rascistas e incitantes a la xenofobia". También está impreso el logo de "Hassgesang" con las runas de la SS en la mitad de la palabra.
Maik B. se descubrío por casualidad.
Maik B. había intentado de defenderse jurísticamente contra una registro domiciliaro en relación con la prohibición, pero la Audiencia Provincial Berlin-Brandeburg declaró en enero de 2013 que B. habría de considerarse como "el que movía los hilos" en el "movimiento de resistencia Brandeburg del Sur".
Pero los agentes del Verfassungsschutz no pudieron parar la carrera del joven jurista con notas excelentes: La justicia bávara no se enteró de la correspondencia entre Potsdam y Múnich. B. ocupó su cargo en Lichtenfels en el otoño de 2013.
Los agentes del Verfassungsschutz bávaro simplemente habían desaprovechado la ocasión para investigar que ocupación seguía el recién llegado extrema-derecha.
Al final se entregó el joven juez él mismo a las instituciones. Debido a un supuesto robo en su taquilla, B. puso una denuncia con la policía de Bayreuth. Allí un investigador se enteró por casualidad que el jurista lleva el mismo nombre que un neo-nazi bajo vigilancia del Verfassungsschutz. Una comprobación de datos determinó que el juez B. es el anterior cantante principal de varios grupos de música neo-nazi.
El ministerio de Justicia bávaro recién el jueves obtuvo conocimiento de los antecedentes del colega de Lichtenfels y ahora está pidiendo un informe detallado de los agentes del Verfassungsschutz sobre B., pero también acerca del porqué nunca les fue señalado el contexto extremista del juez.
En su contratación B. tuvo que rellenar un cuestionario acerca de su fidelidad por la constitución, pero al parecer no era del todo verídico. Aquellas declaraciones falsas ahora podrían facilitar anular el nombramiento de B., como aseguró el ministro de justicia Winfried Bausback.
Pero de todas formas, el caso no está resuelto, ni para los agentes del Verfassungsschutz, ni para el gobierno bávaro.
La oposición de la asamblea bávara está pidiendo enérgicamente la aclaración del asunto. La CSU por su parte, emprende una huida hacia delante. Tanto el ministro de interior Joachim Herrmann como el ministro de justicia Bausback quieren reintroducir el denominado "decreto de radicales", por lo menos para la contratación de jueces y fiscales.
Esto implicaría que la justicia pudiése preguntar al Verfassungsschutz por informaciones generales de cualquier solicitante.