Exacto... Y dice "fiestas en el CIE en las que se bebía alcohol, se escuchaba música y se intimaba con las internas a las que regalaban desde tabaco a perfumería y donde les dejaban usar el móvil. [...] "El que alguna de las limpiadoras dijera que había preservativos no aclara si estos fueron utilizados por los agentes." Ya... claro... ajá. Pues a mí me da que sí se lo pasaban muy bien...
No tiene lógica. Aun siendo solo fiestas se partía de una posición de superioridad sobre las personas a su cargo. Existe abuso implícito, aun sin las pruebas de abuso físico que se pedían.
Aun así... solo expedientados y sancionados con empleo y sueldo... Deberían ser despedidos como poco.
#7 Las víctimas de ETA deberían estar satisfechas en comparación con las víctimas del estado español, que ven una y otra vez como sus verdugos quedan impunes.
Comentarios
Dicen las de la limpieza que había condones, pero que no se demostró que fueran de los policías. En una cárcel de mujeres....
#3 Hombre, se conoce que el ADN policial es feroz y resiste el análisis
Exacto... Y dice "fiestas en el CIE en las que se bebía alcohol, se escuchaba música y se intimaba con las internas a las que regalaban desde tabaco a perfumería y donde les dejaban usar el móvil. [...] "El que alguna de las limpiadoras dijera que había preservativos no aclara si estos fueron utilizados por los agentes." Ya... claro... ajá. Pues a mí me da que sí se lo pasaban muy bien...
Ser de la familia siempre recompensa.
Circulen.
No tiene lógica. Aun siendo solo fiestas se partía de una posición de superioridad sobre las personas a su cargo. Existe abuso implícito, aun sin las pruebas de abuso físico que se pedían.
Aun así... solo expedientados y sancionados con empleo y sueldo... Deberían ser despedidos como poco.
Exigimos cadena perpetua revisable para los terroristas.
Medio AEDE, spam
La Justicia es igual para todos... qué desgüeve (un particular con menos pruebas, acaba en el talego)
#7 Las víctimas de ETA deberían estar satisfechas en comparación con las víctimas del estado español, que ven una y otra vez como sus verdugos quedan impunes.