Publicado hace 1 mes por Ripio a momentosdelpasado.blogspot.com

Cuando se inventó el automóvil a finales del siglo XIX, el simple hecho de conducir era algo casi exclusivo para los hombres, ya que se consideraba una tarea demasiado peligrosa y difícil para las mujeres. Durante los siguientes años, las mujeres desafiaron esa idea compitiendo en carreras o conduciendo sus propios coches, demostrando que podían ser tan competentes como los hombres a la hora de conducir.