Orestes Estévez, un hombre de 65 años, pasó de la vida militar a empresario autodidacta y desarrolló su propia marca de vino usando frutas tropicales y un ingenioso método de fermentación: tapar los botellones con condones. Su negocio comenzó con la producción y venta clandestina en las décadas de 1960 y 1970, hasta que en los 2000 aprovechó reformas del gobierno de Raúl Castro para legalizarse e instalar una pequeña fábrica en su casa, donde tiene casi 300 botellones de 20 litros tapados con preservativos.
Comentarios
Otra cosa no, pero el comunismo ha creado un putiferio en Cuba que produce excedentes de condones.
#1 Ni eso, son importados de China. Malos y baratos, a 5 centavos de peso cubano.
#2 Y para mi sorpresa, son bastante pequeños
#4 Son chinos, adaptados a la anatomía china, en Cuba se usan a modo de capucha
#1 Los condones los proporciona el gobierno para frenar los casos de SIDA.
A mi me dijeron en Cuba que hasta las pizzas las hacían con condones... Les encanta contar historietas... https://www.cibercuba.com/videos/cocina/74/desmontado-el-mito-de-la-pizza-de-preservativos