Estoy de acuerdo con #13 y #10, el artículo es bastante tendencioso y está claro que existen diferencias en la población, haberlas haylas, las de género incluidas.
También es cierto que si introdujeran medidas desde una perspectiva de género real, al menos la noticia sería novedosa. Como comenta #7, ninguna medida de las que se explican en el artículo, atiende a las necesidades del género masculino.
Respecto a las medidas de salud reproductiva y conciliación familiar, mal vamos si se sigue entendiendo cosa de mujeres y no se favorece que los hombres puedan asumir su rol de padre o compañero.
En la gran mayoría de las políticas de género, falta perspectiva. Es absurdo hablar de igualdad, sólo desde uno de los géneros. Por no hablar de la ley de violencia de género, que aquello no tiene nombre.... Igualdad y perspectiva de género, no es eso. Hay mucha pasta invertida en esto y muy poca cabeza administrándola.
Estoy de acuerdo con #11 en que algunas personas e instituciones con representación en este tema, son patéticas(véase Leire Pajín) y que el tema de las subvenciones, es un problema. No sólo por el exceso de lumbreras que hace que la gente que está haciendo las cosas bien, tenga cada vez menos financiación. Sobretodo porque es un sistema caótico e infernal que entorpece, paraliza y derrocha recursos a todo trapo (principalmente en las administraciones) y que deja en precario a todos los servicios subcontratados y acciones sociales, que es casi todo.
El problema es que ésta es la gente que nos representa, la gente que pide subvenciones para llevar a cabo sus programas sin ningún fundamento científico, pero gastando bien. He leído el artículo hasta el final temerosa de encontrarme con que el tratamiento médico específico del género femenino pasa por la consulta de un homeópata (no me hubiera sorprendido en semejante exposición).