#9 Muchas gracias por tu extensa explicación. Que conste que no estoy en contra del negocio siempre que se pague un precio razonable. Como tu dices, habrá gente honesta y deshonesta, como en todas partes. Solo que aquí se comercia con la necesidad de las personas, y la deshonestidad es más grave. Y, sí, sé que la policía está al tanto de las transacciones, aunque también habrá quien se salte el trámite según y como.
#10 Nadie obliga a vender las joyas, solo los malditos problemas económicos. Y hay sitios diferentes para elegir cuál ofrece mejor precio. Claro que debe ser un drama, pero conozco gente a quien esa venta le ha dado de comer cuando no tenían ni para eso. Lamentable, pero así es.
#7 No, no es correcto, pero ni de lejos.
En primer lugar, porque el margen de beneficio lo pone la empresa (la tienda). Como comenté antes, la competencia es tan abundante y tan agresiva, que nos empuja a trabajar con unos márgenes de beneficio bajísimos, aproximadamente, de entre el 8% y el 10%. En la práctica, de cara al cliente, ocurre lo siguiente: si la cotización del oro de 18 KT (el más empleado en joyería) es de 30 €/gramo (precios exclusivos de acceso a mayorista), la competencia más fuerte (entre las que me incluyo) compramos las piezas a 29 €/gr. Es decir, nosotros tenemos un margen de beneficio de 1 €.
Suponiendo que la pieza pese 30 GR, nosotros damos al cliente 870 € en metálico (30 GR x 29 €/gr), pero en realidad, si manejamos 1 € de beneficio por cada gramo, el beneficio neto es sólo de 30 €. Sé que sorprende, pero es así.
Pero ahora viene lo interesante. Por ley, nosotros debemos tener en custodia todas las piezas, entre 15 y 21 días (todos los lunes, o quincenas según la provincia, debemos enviar copias de facturas, fotocopia del DNI del vendedor, y descripción exhaustiva de lo que se compra). Y atención, porque si la Bolsa baja (como así ha venido ocurriendo desde principios de octubre), nosotros nos quedamos con el culo al aire: el beneficio de todo lo comprado (y a espera de que se libere) puede ser desde poco, muy poco, 0 €, o en negativo (según la caída). Evidentemente, si la Bolsa sube, ocurre todo lo contrario: el beneficio aumenta.
Así funciona, más o menos, este negocio. Evidentemente, como en todos lados, hay tiendas que no juegan limpio: compran oro no regularizado (por ley, todas las piezas deben ser identificables, nada de trozos sueltos), hay quienes el peso no lo exhiben de cara al cliente, hay quienes mienten, y hay quienes se aprovechan y ofrecen un valor del oro muy bajo (suele suceder en los pueblos). ¿Hay que criminalizar, por tanto, a todo el sector del Compro Oro? Pues no. Hay gente buena y gente mala en todas las profesiones, de la misma forma que hay abogados, talleres de coches, agentes de seguros, etc. que son honestos, y otros que no. Como la vida misma.