#128 Sí, puede que no te entienda. Si vas a trabajar en una pastelería te irá mejor si entiendes a tus clientes y ellos te entienden a ti. En Badajoz se habla castellano, así que aunque seas un inglés nativo que además habla chino e indio ni vas a entender a tus clientes en Badajoz ni ellos te van a entender a ti. De modo que aunque te puedas entender con 3000mil millones de personas, si eso no te sirve para vender tus pasteles en Badajoz de poco te vale. Tu solución como inglés que habla chino e indio cuál sería entonces? Prohibir el castellano en Badajoz? es eso? O si por el contrario eres tu el dueño del negocio y necesitas un vendedor de cara al público y vas a contratar a alguien no vas a tener en cuenta si entiende o no el castellano a la hora de atender a tus clientes?
Pues si entiendes que el castellano hace falta en Badajoz, por qué no entiendes que el catalán hace falta en Olot?
Y si entiendes que el castellano es más útil que una combinación de inglés, indio y chino en Badajoz, por qué no entiendes que el catalán es más útil que el indio, el chino o el inglés para trabajar de cara al público en una cuarta parte de España?
Así que sí, ese plano que comentas me iría bien.
#132 la cosa es.. que sabiendo catalán y castellano entiendo el francés leído sin haberlo estudiado nunca. Entiendo el italiano leído sin haberlo estudiando nunca, hasta el punto que he leído libros en italiano. De vez en cuando tengo que buscar alguna palabra y ya está. cuando estuve en lisboa entendía el portugués escrito, tampoco sin haberlo estudiado nunca. Dudo que el galego o el asturiano me fueran a suponer un problema. Y por lo que se refiere al euskera, si me hallara en esa situación, ya vería. Si hay que aprender algo pues se aprende.
Cuando se dice que las lenguas son riqueza no hay que pensar en monedas o joyas: incrementan la agilidad mental, ayudan a entender el propio idioma (la diferencia entre adiestrar en castellano y su equivalente ensinistrar en catalán, o la curiosa palabra sapoconcho con que en Galicia llaman a las tortugas) y sobretodo facilita mucho aprender más idiomas. Mi hermana estudió inglés en la escuela, alemán por su cuenta en academia un año. Se fue un año a Suecia (beca, por su trabajo de final de carrera) y volvió hablando sueco, gracias al parecido con el inglés y el alemán, cuando la mayoría de españoles que van allí vuelven sin saber nada de sueco. Luego estuvo en italia y volvió hablando italiano como si fuera de allí.
El ejemplo que pones sería mucho más fácil si el catalán, el galego y el euskar aparecieran alguna vez en alguna televisión en toda españa. De repente mucha gente se daría cuenta de cómo suenan, de que pueden hasta resultar curiosas, interesantes o hasta atractivas, y quizá hasta alguno aprendería solo por curiosidad.